LA FEDERACIÓN “DEBE DIÁLOGAR” CON EL MAGISTERIO DEMOCRÁTICO
La reforma educativa de corte neoliberal, cuyo eje central fue la imposición de una evaluación punitiva como primer paso para despojar de derechos laborales a maestras y maestros mexicanos, para implantar una gestión empresarial en las escuelas, mercantilizarlas y cambiar los contenidos educativos con base en un modelo tecnocrático, deshumanizante, que ha sido acompañada de la represión a los contingentes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación y de miles de docentes que se han sumado a la lucha por abrogar esa reforma.
El magisterio nacional inició ayer un paro para exigir la reinstalación de 586 maestros despedidos en forma injusta, la abrogación de la reforma y la apertura del diálogo para resolver sus demandas.
Como parte de su lucha, hace una semana anunciaron tres caravanas rumbo a la Secretaría de Gobernación en Ciudad de México, para presentar sus demandas. Desde la tarde del domingo y en la madrugada de ayer fueron retenidos por horas los autobuses en los que viajaban los profesores para incorporarse a las marchas, violentando su derecho constitucional al libre tránsito.
Exigimos al gobierno federal atender las legítimas demandas del magisterio, abrir la mesa de diálogo y reinstalar a los docentes que luchan contra la evaluación punitiva. Iniciaremos una campaña internacional de solidaridad con el magisterio democrático de México. Invitamos a la conferencia de prensa para el 7 de junio a las 17 horas, en el plantón del magisterio, instalado frente a Gobernación. Hoy 5 de junio se cumplen nueve años de la tragedia que convirtió en infierno un
lugar que debió ser un resguardo seguro para hijos de trabajadoras en Hermosillo, Sonora. Ahí murieron calcinados 49 niños de entre cinco meses y cinco años de edad, y más de cien quedaron heridos y con daños de por vida.
Fue una tragedia que pudo evitarse si la avaricia de los propietarios, vinculados con Margarita Zavala, no les hubiera impedido invertir en los mínimos equipos de seguridad, como extintores de fuego, salidas de emergencia y techos sólidos. La falta de amor por los niños y de cultura para protegerlos explican también lo ocurrido en septiembre pasado en el Colegio Rébsamen de Tlalpan.
Por ello es importante insistir en la justicia y la no impunidad de los responsables. Igualmente, es necesario que los candidatos den espacio en los debates para comprometerse con programas concretos de atención a los graves problemas y la vulnerabilidad de niños y adolescentes en todo el país.
Hasta ahora ningún candidato se ha ocupado de ello, como si en México no hubiera millones de niños de todas las edades sufriendo tragedias que van desde la muerte por desnutrición, hasta la trata, la prostitución forzada y la carencia total de oportunidades de educación y desarrollo. Quienes aspiran a gobernar debieran tener muy claro que un país sin proyecto para su infancia es un país sin proyecto.