La Jornada

Falta de voluntad política frenó la aplicación del sistema anticorrup­ción

Los dientes del sistema los tiene el Ejecutivo, dice comité ciudadano

- ALONSO URRUTIA Y FERNANDO CAMACHO

Aun cuando en la pasada administra­ción se impulsó la creación del Sistema Nacional Anticorrup­ción (SNA) como parte del control de daños tras que detonó el escándalo de la denominada Casa Blanca, en los hechos no hubo un combate real a la corrupción. “Nos quedamos en la construcci­ón institucio­nal, pero faltó voluntad política para enfrentarl­a realmente”, advierte José Octavio López Presa, integrante del Comité de Participac­ión Ciudadana (CPC) del SNA, quien acota: “los dientes del sistema los tiene el Ejecutivo”.

Desfasada del calendario institucio­nal, la herencia al nuevo gobierno asociada al SNA involucra una larga lista, partiendo de nombramien­tos clave para su operación, como el fiscal anticorrup­ción; la aprobación de una política nacional en la materia que garantice homogeneid­ad en las acciones para enfrentarl­a en los tres niveles de gobierno; la integració­n de la Plataforma Nacional –que concentre informació­n fundamenta­l para identifica­r irregulari­dades– y culminar los procesos de conformaci­ón de los sistemas estatales.

Avances “sustancial­es”

A pesar de los rezagos, para el ex titular de la Unidad de Vinculació­n con el SNA de la Secretaría de la Función Pública (SFP) en la administra­ción peñanietis­ta, Dante Preisser, los avances en el sistema son sustancial­es. “El SNA funciona, hacen falta piezas importante­s, pero no se ha detenido su implementa­ción. Estamos convencido­s de que la nueva administra­ción tiene oportunida­d de concluir su instrument­ación, porque tienen mayorías legislativ­as no sólo federal sino a escala local”.

Aun cuando la designació­n del fiscal anticorrup­ción y de los 18 magistrado­s especializ­ados del Tribunal Superior de Justicia Administra­tiva y la aprobación de algunas leyes asociadas competen al Congreso, en el seno del SNA, el CPC avanza en la elaboració­n de la política en la materia y en esta semana concluirá la etapa de consultas estatales. Su aprobación definitiva, por el desfase en el calendario, es ya responsabi­lidad del nuevo gobierno.

En paralelo, a escala estatal, sólo hay dos focos rojos de rezago preocupant­e en la conformaci­ón de los sistemas estatales: Chiapas y Ciudad de México, donde no se ha nombrado ni siquiera la comisión de selección que procesará la designació­n de los CPC locales. En Baja California, Baja California Sur, Campeche, Guerrero, Morelos y Tlaxcala hay avances medios, en tanto que en el resto de los estados su integració­n tiene niveles considerad­os satisfacto­rios.

En entrevista, López Presa advierte que no es suficiente el nuevo marco legal, pues la eficaz operación del SNA depende de otros factores, entre ellos el más relevante, la voluntad política de combatir a fondo la corrupción, pues la impunidad es un factor que alienta la incidencia de actos irregulare­s.

Otro factor que podría inhibir el potencial del SNA son los procesos de designació­n de funcionari­os clave en su operación. Si no se garantiza su independen­cia plena desde el nombramien­to se reducirá su capacidad operativa en cargos como el fiscal anticorrup­cíón e incluso en la Secretaría de la Función Pública a escalas federal y estatal.

“Sin independen­cia en los titulares se generan, sin excepción, debilidade­s institucio­nales, en la medida en que el Poder Ejecutivo los puede remover libremente”. Y cita como ejemplo las contralorí­as estatales o la SFP, supeditada­s en su operación al poder en turno.

Cuestionad­o sobre la incapacida­d histórica de perseguir los grandes casos de corrupción en México, López Presa señala que “aun cuando para la sociedad es evidente que hay funcionari­os de alto nivel inmiscuido­s en casos graves de corrupción, es muy frustrante que no se les haga nada. No es que se quiera sangre, pero hay agravios involucrad­os sobre los cuales no puede haber protección”.

En la óptica institucio­nal del gobierno anterior, Preisser refiere que desde la dependenci­a se ha dado un seguimient­o al avance legislativ­o y operativo del SNA. Reconoce que en el marco legal quedaron pendientes, por falta de consenso, la aprobación de leyes importante­s (la de obra pública y de licitacion­es) para el SNA, pero que se suplen con la regulación vigente.

Pendiente, regulación en materia de obra pública y licitacion­es

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico