Desfalco de más de $672 millones en el sector salud de Tabasco
Irregularidades en la gestión de Núñez, mayores que con Granier
El director general del Instituto de Seguridad Social del Estado de Tabasco (Isset), Fernando Mayans Canabal, interpuso 10 demandas ante la Fiscalía General del Estado (FGE) por fraude y peculado por más de 672 millones de pesos en agravio de esa institución.
Mencionó que en 2012 se habrían desviado 72 millones de pesos destinados a medicamentos. Además, se está realizando una auditoría al fondo de pensiones del Isset.
“Todo lo que estamos haciendo es para defender a los trabajadores del estado de Tabasco. Somos sus aliados. Los recursos son de ellos y deberían estar en el instituto para brindar mejor atención médica”, aseguró.
Las anomalías provienen de la administración que encabezó el perredista Arturo Núñez Jiménez (2013-2018). Diputados del tricolor han exigido a Morena, que es mayoría en el Congreso estatal, castigar a los ex funcionarios implicados en el saqueo al erario, explicó.
Aseguró que también detectaron falsificación de firmas y cédulas de médicos en recetas apócrifas para justificar gastos.
El hospital del Isset fue uno de los más afectados por desabasto y robo de medicamentos en la anterior administración.
Desabasto en hospitales
Médicos tabasqueños afirmaron que la crisis del sistema de salud heredada por Núñez Jiménez es peor a la que dejó el ex gobernador priísta Andrés Granier Melo en 2012, pues dejó a los hospitales sin recursos para adquirir medicamentos y otros productos de primera necesidad.
Mayans Canabal, quien asumió el cargo en enero, señaló que hay avances en la reorganización del hospital con una nueva política interna. Estimó que el abasto de medicamentos en las farmacias del instituto se ha incrementado en 70 por ciento.
El pasado lunes, al poner en marcha las Jornadas de Cirugías de Cataratas, ante pacientes, familiares, personal médico, de enfermería y directivos, exhortó a no robar medicamentos y a cuidar el patrimonio del Isset y de los trabajadores del estado.
“Vamos a ser muy estrictos, porque no podemos avanzar así. Es un cambio de cultura. Si hay un acto de corrupción lo vamos a castigar con todo el peso de la ley”, advirtió.