MÉXICO SA
Fobaproa, atraco permanente // Dos cuentos, una triste realidad
OS CUENTOS, UNA
1) ALLÁ POR jó de pagar por el referido “rescate”, sin olvidar los citados pagarés del Fobaproa.
ASÍ, SÓLO EN lo que va del presente siglo, el “capítulo cerrado” (Medina Mora dixit) sumó 302 mil millones de pesos a los pasivos del Fobaproa-IPAB, y contando, mientras los bancos aumentan sus utilidades netas vertiginosamente. Se trata, pues, de la vieja práctica: socializar los costos y privatizar las ganancias, sin olvidar que por el atraco a la Nación nadie terminó en chirona, y sobran los candidatos públicos y privados (comenzando por Zedillo y sus dos secretarios de Hacienda: Guillermo Ortiz y José Ángel Gurría).
LO PEOR DEL caso es que en los 24 años transcurridos lo que los mexicanos han pagado por intereses rebasa el monto original del “rescate”, y todavía les resta por cubrir –hasta ahora– alrededor de 950 mil millones de pesos.
SIRVA LO ANTERIOR para digerir –bicarbonato a la mano– la información de La Jornada (Israel Rodríguez): después de 24 años de instrumentarse el rescate bancario mediante el Fobaproa, (con cargo al erario nacional) se ha pagado en intereses un monto superior al adeudo inicial, que era en 1995 de 521 mil millones de pesos (en aquel entonces el tipo de cambio peso-dólar rondaba 5.3 por uno).
PESE A QUE se ha erogado entre 622 mil millones y 800 mil millones de pesos por el salvamento de los bancos (en aquel momento en manos de especuladores bursátiles y empresarios amigos del régimen) todavía se adeudan más de 900 mil millones de pesos. Para la administración de estos pasivos el gobierno federal autoriza anualmente la contratación de créditos o la emisión de valores para canjear o refinanciar las obligaciones financieras del Fobaproa-IPAB (práctica que, por lo visto, no tiene fin).