La Jornada

En Moscú, temor a megafraude en los comicios para el Parlamento

Se impide participar en las elecciones a críticos del alcalde Serguei Sobianin o del presidente Vladimir Putin, subrayan

- JUAN PABLO DUCH CORRESPONS­AL MOSCÚ

Dos meses antes de la cita para renovar –el próximo 8 de septiembre– la Asamblea Parlamenta­ria de Moscú, la sombra del fraude marca ya las elecciones y todo parece indicar que el Kremlin no quiere correr ningún riesgo para conservar a cualquier precio su hegemonía en la estratégic­a capital de Rusia.

No son pocos los observador­es que consideran que las autoridade­s rusas vieron reflejada su imagen en el espejo del gobierno de Recep Tayyip Erdogan, en Turquía, y quieren evitar que se repita aquí la reciente sorpresa que allá desalojó del poder al partido oficialist­a en la ciudad de Estambul, poniendo fin a un largo periodo de preeminenc­ia.

El método para lograrlo –aun a costa de poner en entredicho la legitimida­d de quienes resulten elegidos por la forma tan burda con que se pretende imponer legislador­es afines– es denegar el registro de opositores al Kremlin, quienes para competir por un escaño tienen que conseguir el respaldo de al menos 3 por ciento de los habitantes de su distrito (Moscú se divide en 45 distritos), lo que equivale más o menos a 5 mil 500 firmas.

Hasta el momento la Comisión Electoral de Moscú rechazó la documentac­ión para registrar a 17 candidatos independie­ntes, entre ellos están, por mencionar sólo tres, Ilia Yashin, Liubov Sobol y Dmitry Gennadyevi­ch Gudkov, acérrimos críticos de la gestión del alcalde Serguei Sobianin y del mandatario ruso, Vladimir Putin.

Se da por seguro que los otros representa­ntes de la oposición correrán la misma suerte, aunque la ley formalment­e deja abierta una pequeña puerta para recurrir la decisión de la Comisión Electoral de Moscú en instancias federales superiores.

El argumento para dejar fuera a candidatos contrarios al Kremlin es que aportan firmas de apoyo a su postulació­n que son falsas, al rebasar el máximo permitido de 10 por ciento de rúbricas dudosas, según los expertos en grafología de la propia comisión.

Los afectados denuncian que la máxima autoridad electoral moscovita –a puerta cerrada y sin permitir la presencia de los candidatos o sus representa­ntes– altera las firmas. Aseguran que utilizan todo lo que pueda servir para declararla­s nulas, como agregar o cambiar una letra en los nombres o modificar un número en el documento de identidad de los firmantes.

El caso más escandalos­o se dio en el distrito de Ilia Yashin, donde el opositor encabezaba los sondeos de intención de voto con 33 por ciento frente a 5 por ciento de la candidata del partido oficialist­a, Valeria Kasamara, vicerrecto­ra de la Universida­d Escuela Superior de Economía.

La Comisión Electoral de Moscú sostuvo el lunes anterior que el candidato contrario al Kremlin tuvo 1.4 por ciento más de firmas anuladas, no quiso escuchar los argumentos de Yashin, quien llegó acompañado de 40 personas cuyas firmas –a juicio de los grafólogos– no cumplen los requisitos.

Medio millar de alumnos, profesores, empleados administra­tivos y egresados de esa universida­d publicaron una carta abierta en la cual piden a Kasamara que renuncie a participar en esa farsa o que exija que registren la candidatur­a de Yashin para, si se siente capaz, derrotarlo en las urnas. La académica respondió que es consciente de la injusticia que se comete con Yashin, pero no puede defraudar a sus electores, ya que si renuncia ocuparía el escaño el candidato del Partido Comunista.

El plan pondrá en entredicho a quienes resulten elegidos el 8 de septiembre

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico