Pedro Sánchez descarta incluir a Pablo Iglesias en el gobierno
Las negociaciones en España entre ambos líderes están rotas y sin ningún tipo de acercamiento
El presidente del gobierno español en funciones, el socialista Pedro Sánchez, advirtió que el “principal escollo” para la formación de un nuevo gobierno es la exigencia del líder de Unidas Podemos (UP), Pablo Iglesias, de formar parte del gabinete, ya sea con una “vicepresidencia social” o con un “ministerio”.
Sánchez aseguró que en ningún caso aceptará esas exigencias, que tildó de “imposiciones”, entre otros motivos por las profundas diferencias que tiene con el otro dirigente de la izquierda en asuntos como la crisis abierta en Cataluña.
Las elecciones generales de España fueron el pasado 28 de abril, y las negociaciones para formar una mayoría parlamentaria con el fin de sacar adelante la investidura han fracasado. El Partido Socialista Obrero Español (PSOE), con 123 diputados, y UP, con 42 escaños, no llegan a la mayoría absoluta –que es de 176 diputados–, pero al ser los dos partidos de referencia de la izquierda su alianza es vital para sacar adelante la votación.
Sin embargo, las negociaciones entre el PSOE y UP están rotas. El único contacto de los líderes políticos es a través de los medios de comunicación y cada día en un tono más duro. El mandatario reconoció en una entrevista televisiva que el “principal escollo para la formación de un gobierno es la presencia de Pablo Iglesias en ese gobierno”, además de recriminar a su supuesto aliado que “en el 99 por ciento de las negociaciones sólo hemos hablado de los cargos que exigen a cambio”. Es decir, una vicepresidencia “social” y hasta dos o tres ministerios, entre ellos el de Hacienda y el del Trabajo.
Sánchez argumentó que un gabinete con Pablo Iglesias dentro no funcionaría, entre otras razones porque ambos representan a dos partidos políticos con similitudes, pero también con hondas diferencias, sobre todo en lo relacionado a la crisis abierta en Cataluña. “Pablo Iglesias habla de presos políticos y yo necesito un vicepresidente que defienda la democracia española”, señaló.
Desde la formación morada respondieron que cuando “vetan a Pablo Iglesias en el gobierno nos vetan a todos”. Además, desde UP presentaron los resultados de una consulta a sus bases en la que 70 por ciento respaldó la estrategia de Iglesias de exigir su presencia en el gobierno.
La sesión de investidura arrancará el próximo lunes y terminará el jueves, cuando se prevé que se lleve a cabo una segunda votación que permita la aprobación de la investidura por mayoría simple. Con el escenario actual el fracaso está asegurado, con lo que se avisora una nueva jornada electoral para el próximo 10 de noviembre.