Instala Sedena módulos para videollamadas de enfermos y sus familias
Sánchez García exige que empresa y gremio formulen una respuesta eficaz ante la emergencia sanitaria
El Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) cuenta con recursos millonarios , pero no ha invertido nada para comprar los insumos que protejan a ese gremio frente a la pandemia de Covid-19 y tampoco se preocupa por garantizar su seguridad frente a los contagios del virus en las instalaciones terrestres y marítimas de Petróleos Mexicanos (Pemex), por lo que los decesos aumentan día tras día, advirtió la senadora de Morena Cecilia Sánchez García.
Señaló que hasta el pasado día 25, de acuerdo con los reportes oficiales fallecieron 204 integrantes del gremio petrolero por coronavirus: 72 de ellos trabajadores en activo, 70 jubilados, 60 familiares y dos trabajadores externos, además de que hay 6 mil 573 casos sospechosos de personal de Pemex, sin que el STPRM, que encabeza de manera provisional Manuel Limón Hernández, haga algo.
Incluso desde marzo el sindicato petrolero –que ingresa más de 100 millones de pesos al mes sólo por cuotas sindicales– cerró sus puertas, sin ofrecer ningún tipo de atención a sus representados, recalcó la senadora, quien planteó ante la Comisión Permanente que ese órgano del Congreso pida al STPRM que, de manera conjunta con Pemex, hagan frente de inmediato a la pandemia y “formulen una respuesta rápida, coordinada y eficaz”, que garantice la seguridad y la salud tanto física como sicológica de los empleados y sus familias.
Denuncias de trabajadores
La legisladora y ex trabajadora petrolera hizo notar que aunque Pemex asegura que ha aplicado un plan de emergencia y 11 protocolos de prevención para la atención y transporte de personal con sospecha de contagio en cada una de las plataformas, versiones de los trabajadores lo desmienten.
Aseguran, resaltó, que no se lleva a cabo ningún tipo de protocolo de sana distancia y nunca se han desinfectado los medios de transporte: ni lanchas, helicópteros, ni comedores y dormitorios, “donde a diario miles de petroleros continúan pasando la noche hacinados”.
Asimismo, detalló la senadora, “los trabajadores advierten que a pesar de que varios de sus compañeros, que lamentablemente perdieron la vida, presentaban síntomas claros de estar infectados por el Covid-19 no fueron retirados de plataformas ni recibieron atención médica oportuna”.
Enfatizó que lo más grave es que cada enfermo se convierte en un foco de contagio no sólo dentro de las plataformas, sino que al llegar a tierra tampoco son atendidos adecuadamente, por lo que ponen en riesgo también a sus familias y se propicia que el coronavirus se propague a otros estados y municipios del país.
Fue público que durante abril la plataforma Abkatun Alfa, localizada a 79 kilómetros de Ciudad del Carmen, se convirtió en un foco de infección de Covid-19, lo que reveló que la empresa nunca aplicó medidas preventivas.
Frente a ese panorama, insistió, “el STPRM no ha estado al lado de los trabajadores en lo que le corresponde y, por el contrario, según denuncian también trabajadores, amenaza a quienes difundan las condiciones en que se encuentran los centros laborales, así como las omisiones en las medidas de emergencia sanitaria”.
La legisladora denunció que pese a la salida de Carlos Romero Deschamps, persiste la corrupción en el sindicato petrolero, toda vez que de “forma inhumana y ruin” los dirigentes impiden la incorporación de médicos para atender a los trabajadores, pues ya no pueden cobrar, como lo hacían antes, por las fichas de contratación.
Con el propósito de mantener el contacto de los familiares con los pacientes que son atendidos por Covid-19 en instalaciones de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la institución castrense puso en marcha módulos de vinculación para que a través de videollamadas puedan comunicarse entre ellos.
La Sedena tiene contempladas 117 instalaciones (hospitales de especialización, nosocomios militares de zona y unidades médicas de consulta externa); asimismo, se cuenta con 32 clínicas Insabi que son operadas por personal militar, y a la fecha se encuentran preparadas 30 instalaciones sanitarias reconvertidas en hospitales para pacientes afectados por Covid-19, donde son atendidos alrededor de 380 enfermos.
En ese contexto, la comandancia de la 37 Zona Militar dio a conocer que en el módulo de vinculación familiar, los pacientes y sus seres queridos se comunican “mediante videollamadas con una duración de cinco a 10 minutos aproximadamente, en horario de visitas, con la finalidad de que interactúen y mejoren su estado anímico, así como brindar tranquilidad a los familiares de la evolución y atención medica que reciben”.
En esas áreas también se cuenta con personal de sicología, para que brinden “apoyo a los familiares” que lo requieran.
La comunicación dura de cinco a 10 minutos y se realiza en horario de visitas