RESBALON INESPERADO
FUE EL ÚLTIMO QUE LO HABÍA VENCIDO REAL MADRID VOLVIÓ A EXHIBIR SUPERIORIDAD, LE QUITÓ EL INVICTO AL ATLÉTICO Y CURÓ SU FALTA DE TINO
Los jugadores saben que hay momentos complicados en una temporada. Pero también saben que podemos hacer muchas cosas buenas como equipo”
ZINEDINE ZIDANE DT REAL MADRID
Madrid, España.- No fue el partido de Joao Félix ni de nadie en el Atlético de Madrid, que resbaló 2- 0 en el clásico ante Real Madrid, que le quitó el invicto en esta temporada en la Liga española, con la misma cantidad de goles que había permitido hasta el momento.
En un clásico sin la pasión de los aficionados en las gradas, debido a la pandemia de la Covid-19, el Atlético fue exhibido por la superioridad de su rival.
Hubo una acción tan involuntaria como definitiva, que marcó el rumbo del encuentro, al minuto 15, cuando Casemiro remató un tiro de esquina que quizá no habría terminado en gol sin el resbalón del volante mexicano Héctor Herrera, en su regreso al cuadro titular. No fue el único motivo en la derrota porque el Atlético no fue el equipo invencible que había mostrado. La defensa del título por parte del Real Madrid pasaba por un choque con tintes decisivos pese a estar en diciembre.
Del abismo a la resurrección para sentirse nuevamente aspirante a todo.
En el respeto entre ambos equipos, sin presión alta y poca intención de arriesgar, Casemiro castigó al Atlético, desdibujado el día que tenía la oportunidad de dar un golpe de autoridad. Otro clásico de Joao Félix en la intrascendencia, incapaz de cambiar el ritmo lento de su equipo y sustituido con nuevo disgusto. Marcos Llorente lo intentó en un duelo especial para él por enfrentarse a su ex equipo.
El riesgo que correspondía al Real Madrid se trasladó al Atlético cuando buscó sacar algo positivo. Tras un error de los que cuestan caro, en cesión atrás de Renan Lodi que encontró a Karim Benzema y a Kroos, derribado al límite del área en una acción que el árbitro vio fuera, llegó el momento clave del clásico.
Llorente encontró espacio a la espalda de Ferland Mendy, pero su centro perfecto no alcanzó a ser rematado por Thomas Lemar. Siete minutos después llegó la sentencia. Una nueva acción a táctica fija con despeje de la defensiva y potente tiro de Dani, que el poste repelió a la espalda del portero Jan Oblak, en el minuto 63.
El esloveno sólo había permitido dos goles en lo que iba de la Liga, los mismos que asestó el Real Madrid, falto de pegada en partidos anteriores, pero que cura sus males a base de intensidad y criterio con el balón.
El fin de la racha positivo del Atlético de Madrid, ante el último equipo con el que había perdido. Fueron 26 fechas sin conocer la derrota desde que se midió a un Real Madrid nuevamente superior, que pudo firmar el tercero, con Lucas Vázquez dejando otra exhibición física, pero que se topó con Oblak.
Los Merengues se enganchan en la lucha por el título de la Liga española, en la que el Atlético pudo asestar un golpe con tintes definitivos.