Foro Generación Igualdad
Se ha
generado un retorno a las prácticas autónomas feministas por parte de inmensidad de mujeres jóvenes latinoamericanas que ven su existencia en el día a día constantemente en peligro, no sólo por las políticas neoliberales rapaces de la contemporaneidad que atacan fuentes de empleo, oportunidades educativas, de territorio, sino también por la violencia letal del patriarcado materializado en feminicidios, trabajo sexual forzado, desaparición forzada.
Teniéndose estos escenarios suceden el seguimiento Beijing + 25 años y el Sexagésimo quinto período de sesiones de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (15-26 marzo 2021) así como la reciente puesta en marcha de Foro Generación Igualdad que Francia copreside con México durante el presente año.
En caso de que suceda involucramiento de mujeres jóvenes con las medidas antes mencionadas ¿Cuál será la participación de las nuevas generaciones de feministas en los proyectos internacionales, estatales por los derechos de las mujeres, así como los efectos de estas interacciones? ¿Qué acercamientos y/o distanciamientos existirán con las iniciativas de carácter institucional vinculados a mujeres cuando actualmente se da un repunte de un retorno a la autonomía feminista? ¿Qué se comprenderá por feminismo global, políticas feministas desde los aparatos institucionales de los Estados?
Estas son algunas de las preguntas que me surgen sobre todo tras escuchar en palabras del presidente francés Emmanuel Macron, al participar de la inauguración virtual del Foro Generación Igualdad el pasado 29 de marzo de 2021 en conjunto con el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador lo siguiente: "Gracias a la determinación común de nuestros dos países, que con orgullo defienden una diplomacia feminista, hemos logrado llegar hasta aquí".
¿De qué se trata la diplomacia feminista que menciona Macron une a la nación mexicana con la francesa? ¿Qué va a significar para las mujeres y niñas de ambas naciones esta política feminista exterior y a las mujeres que transitan dentro y fuera de sus territorios? Son preguntas fundamentales a explorar desde la adopción de una política exterior feminista en México en 2020 y de una diplomacia feminista en Francia desde 2018. Ejes que por ser muy amplios a analizar no abordaré en el presente texto pero
que si son primordiales al estudiar los discursos de los distintos feminismos en el contexto de la política formal actual.
Sin embargo, si me gustaría hacer una acotación. En la inauguración del Foro Generación Igualdad el presidente Andrés Manuel López Obrador externó sus condolencias por el feminicidio por brutalidad policial en Tulum, Quintana Roo, de la compañera salvadoreña en condición de refugiada en México, Victoria Esperanza Salazar, "Fue brutalmente tratada y asesinada" y "se va a castigar a los responsables, ya están en proceso de ser enjuiciados y no habrá impunidad", sentenció López Obrador ¿Podría comprenderse este accionar por parte del Ejecutivo como una muestra de la política exterior feminista que enarbola nuestro gobierno actual?
No se puede sentenciar a rajatabla que la vinculación de los movimientos de mujeres y feministas con las instancias internacionales y gubernamentales sean negativas, y muestra de ello es el hecho de que Beijing 1995 internacionalizó la política feminista, permitió que mujeres de distintas latitudes se conocieran y aprendieran de distintos contextos de lucha y resistencia y que se tejieran lazos políticos entre mujeres externos a la ONU.
Lo que sí es fundamental es que los movimientos de mujeres y feministas que decidan participar en la esfera de la política pública formal no despoliticen sus acciones, ni vean debilitada la autonomía de sus posturas ni organización en pos de intereses de grupo, ni neoliberalistas.
Las mujeres jóvenes latinoamericanas que se involucran en los movimientos de mujeres y feministas saben de las trayectorias de sus antecesoras, aquellas que desde distintos lugares han abierto espacios para el accionar de las nuevas generaciones. Aprendamos todas de sus experiencias y de las propias en la creación de agendas feministas para todas las políticas públicas.