Denuncian ejecuciones de civiles en Venezuela
PARA ANALISTAS forenses, los cuerpos de los campesinos fueron dispuestos para que aparecieran “boca arriba, con un arma pegada a la mano” en un mismo “patrón de simulación”
ARAUQUITA. Emir Ramírez huyó antes de que sus padres, un hermano y un tío murieran presuntamente a manos de uniformados venezolanos. A salvo de las balas, en el municipio colombiano de Arauquita, describe con rabia las fotos de su familia asesinada, algunos con botas y armas desconocidas para él.
Ramírez defiende sin reservas la inocencia de los suyos, una familia colombovenezolana. “!No eran guerrilleros. Eran las personas más humildes del mundo!”.
El 21 de marzo estallaron combates entre fuerzas oficiales de Venezuela y guerrilleros. Nunca antes los pobladores habían vivido algo parecido, relata.
Unas 6 mil personas llegaron a Arauquita como refugiados, forzados a vivir en carpas en plena pandemia.
El Ministerio de Defensa de Venezuela ha informado de nueve “terroristas” y cuatro uniformados fallecidos, así como más de 30 detenidos.
Colombia y la oposición venezolana aseguran que Caracas pretende con la ofensiva ayudar a guerrilleros disidentes colombianos en la lucha contra otra facción por el control del narcotráfico.
El jueves 25 cayeron los familiares de Emir. Y la misma noche, un conocido le mostró en el celular fotos de los cuerpos, vestidos de verde militar y armados. Aunque los pobladores aseguran que eran campesinos sin nexos con ningún grupo.