Ya ‘cruzaron hasta El Paso’
Además de la compleja máquina para Stoneridge, tiene entre sus productos terminados una barnizadora para bobinas, una marcadora para bolsas de aire, y varios más en proceso. La calidad del trabajo ya los hizo expandirse a El Paso. “Tenemos dos empresas una en El Paso y otra en Juárez, exportamos equipos de automatización que hacemos desde aquí y ajustamos en El Paso”, indicó.
La automatización, afirma, es un trampolín para toda la industria que quiera mejorar sus utilidades, e ir creciendo.
“Si su demanda crece no puede depender de una persona, se cansa y la calidad merma. Desgastas a tu trabajador y lo pones en riesgo a él y a tu producto.
También señala que la automatización no se trata de reemplazar la mano de obra humana por máquinas.
“La automatización no es una sustitución en automático de los trabajadores, se trata de una evolución. Tenemos que estar más preparados. A un operador lo contratan con un mínimo de estudios y le pagan un salario mínimo. A un técnico o un ingeniero que hace o mantiene estas máquinas le pagan más, pero tiene que estar más preparado, si la gente se prepara, esto es una mejora y como ciudad nos va a ir mejor”, agrega.
“Juárez puede cambiar, convertirse en un punto clave para la industria nacional, pero se requiere apoyo del gobierno para que impulse a los emprendedores locales, que puedan aprovechar la maquiladora para generar empresas locales que traigan mayor riqueza y calidad de vida para los juarenses”, añade.
Para García Holguín es clave trabajar en el lado emprendedor de los juarenses.
“Claro que podremos hacer lo que ha logrado Guadalajara y Monterrey, pero claro que se requiere quién coordine, sobre todo alguien que trabaje en el lado cultural, que estimule a la gente para que le pierda el miedo a aventarse y a invertir”, señala.
“Tenemos que canalizar esos miedos y convertirlos en precauciones, eso es todo lo que hay que hacer”, añade.