NAVES DE LA A A LA C
En el parque industrial Gema un viejo edificio industrial luce ya deteriorado por el paso de los años. Parte de su estructura está grafiteada. Los andenes de carga, que dan entrada y salida a los productos de maquila, se encuentran cerrados y sin ningún movimiento.
La edificación que hace tiempo albergó operación de manufactura hoy en día está desocupada y disponible para su venta.
En las diferentes zonas industriales de la ciudad hay naves que cuentan por si solas la estancia y operación de la industria maquiladora en Juárez, pues desde ahí es donde el gremio elabora toda clase de artículos.
De acuerdo con el monitoreo de diversas firmas de bienes raíces industriales, en la ciudad existe un padrón de poco más de 300 naves.
El monitoreo de Citius Capital indica que al finalizar el segundo trimestre de 2016 había 14 edificios clase C desocupados, la categoría considerada ya como obsoleta dentro del mercado. Esto corresponde a un 26 por ciento de la oferta total.
Eduardo Cinco Cetina, representante de la compañía en la ciudad, comentó que esa especie de naves son las que tienen menor probabilidad de volver a ocuparse dentro de la rama de la industria.
Sin embargo, comentó que todavía hay transacciones de edificaciones tipo C, aunque para otros giros. La razón es que se comercializan por debajo de los costos del mercado.
El muestreo más reciente de Citius indica que actualmente hay 54 estructuras industriales disponibles. De esas 12 son tipo A, 28 del ramo B y 14 del C.
Cinco Cetina detalló que las diferencias entre cada una radican en su construcción y la infraestructura que ofrecen a la maquiladora.
La de clasificación A se considera como la más moderna. Sus características principales son un mínimo de 26 pies de altura, sistema de iluminación natural, sistema contra incendios y espacio para maniobra de camiones de carga.
En el caso de la B y C miden en promedio menos de 20 pies de altura, reducido número de andenes de carga, así como de patios para vehículos pesados.
Eduardo Cinco detalló que los rasgos de construcción de un complejo industrial C ya difieren de los estándares actuales, por lo que se tornan fuera de tendencia para la maquiladora.
En cambio, A y B aún cumplen con las exigencias de los corporativos y eso contribuye a que sigan acogiendo a la producción local.
El especialista en bienes raíces resaltó que esto no significa que las de orden C sean totalmente inservibles, ya que pueden usarse en otros giros, como el comercial.
Lo más perjudicados son los dueños de tales inmuebles, pues pasan varios años sin percibir una remuneración económica.
Por ello, insistió en que es necesario encontrarles un nuevo uso a aquellos que ya son descartados por los corporativos y considerar la opción de tirar lo existente y construir para nuevos inversionistas.
De la reutilización, pero en otros sectores, ya hay ejemplos. En el Parque Bermúdez se derribó una fábrica para levantar un centro comercial.
En el parque Omega, un espacio desocupado fue habilitado como boliche. Otros han sido adecuados como salones de fiesta, iglesias o escuelas privadas.
Las diferencias entre un edificio y otro es su construcción e infraestructura, hoy en día se requieren más las del tipo A que son los más modernos