EL GENIO MEXICANO
“Desde niño supe que quería estudiar Matemáticas”, comenta. Este deseo, lo llevó a estudiar una Licenciatura en Matemáticas en el IPN, después una maestría en la misma carrera y a la par otra en Economía, en la UNAM. Posteriormente conoció al profesor Elmar Altvater, quien de inmediato notó la inteligencia del joven y le sugirió estudiar un Doctorado en la Universidad Libre de Berlín (FU, por sus siglas en alemán).
Así, a los 26 años emprendió un nuevo camino acompañado de su esposa Margarita y su hija Tania. “Nunca tuve ningún problema en la universidad en Berlín, todo fue muy multicultural, mis circunstancias hubieran sido diferentes si hubiera llegado como mesero, pero llegué con conocimientos de alemán y fui bien recibido”.
A la par de estudiar su maestría en la FU, también realizó estudios de inteligencia arti cial y desde 1977 ha trabajado en la docencia. El profesor cuenta con el máximo grado académico que se puede tener en Alemania: la Habilitación en el área de Ciencias de la Computación. Se trata de un grado adicional y posterior al doctorado, que sólo existe en ese país.
En 1989 diseño una computadora ‘Prolog’ para aplicaciones de inteligencia arti cial. Por sus resultados en este campo, la Universidad Martin-Lutero de Halle, en Alemania, lo nombró profesor titular, en 1994. Posteriormente, la Universidad Libre de Berlín le ofreció instalar un laboratorio de Inteligencia Arti cial, por lo que aceptó la oferta. Actualmente, Rojas es el líder del ‘Dahlem Center for Intelligent Systems’ y es profesor de Ciencias de la Computación y Matemáticas en la Universidad Libre de Berlín. Así, ha dedicado más de la mitad de su vida a la docencia y la investigación.
OTROS PROYECTOS
Actualmente, el doctor no sólo continúa trabajando en AutoNOMOS, sino también en el desarrollo de una silla de ruedas inteligente. Este proyecto puede ayudar a personas con parálisis total, ya que les permite manejar la silla a través de comandos verbales o controlados con ondas cerebrales. Otro es E-Chalk, el salón de clases del futuro.
Dice que continuará con su labor de investigación durante los próximos cinco años, ya que cumplirá 65 años, edad en la que es obligatorio jubilarse en Alemania. “Me tengo que apurar para terminar y ver los resultados de los proyectos, como el salón inteligente”, que estará listo en 2016.†