Los efectos sobre el TLCAN
La Comisión para la Cooperación Ambiental (CCA) creada por los socios del TLCAN aún no se pronuncia sobre la decisión de Estados Unidos y su posible efecto en la interacción regional de la industria. En el Tratado de Cooperación Ambiental —que dio vida a la CCA— las partes reconocieron el derecho a establecer su propio nivel de protección del medio ambiente, y en caso de que uno de los países muestre un patrón de incumplimiento pueden solicitarse negociaciones adicionales. Sin embargo, esto nunca ha sido necesario.
Consultado vía electrónica por Manufactura, David Gantz, profesor de la Escuela de Derecho Rogers, de la Universidad de Arizona, y especialista en el TLCAN, explica que el tema ambiental no será clave en el proceso de renegociación. “Dudo que el hecho de que México y Canadá sean partes en el Acuerdo de París tenga un gran impacto”, señala.
Sin embargo, considera que es posible que en la renegociación el vecino país quiera imponerles mayores regulaciones ambientales para reducir —al menos de manera marginal— el diferencial en los costos de fabricación entre su país y México. “Ese es uno de los objetivos buscados por la administración [Trump] para mejorar la competitividad de la industria estadounidense”.