El principio de la portabilidad
WALKMAN TPS-L2
En julio de 1979 Sony lanzó el primer reproductor de casetes portátil del mundo, unos 15 años después de que el audiocasete saliera al mercado. El dispositivo, que abrió el camino para la industria de la música portátil, contaba con dos entradas de audífonos para que el usuario pudiera compartir sus melodías con quien lo deseara. Dentro y fuera de la compañía pensaban que sin una función para grabar, el aparato estaba condenado al fracaso. Diez años después de su lanzamiento ya se habían vendido 15 millones de unidades.