La expedición de las conservas
Alemania, Canadá y Japón, entre los nuevos destinos con potencial para un sector que exporta más de 9,000 mdp al año.
Grupo Marítimo Industria (Grupomar) no quiso esperar a ver el nuevo rumbo que tomará el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) para llevar sus productos a otros destinos.
La empresa atunera, tenedora de la marca Tuny, fue una de las 10 primeras en recibir el certificado Halal, que lo acredita como exportador a países de Oriente Medio, un mercado potencial de 1,600 millones de consumidores. “Buscamos nichos de mercado, donde el atún sea más apreciado”, dice Antonio Guerra, director general de Grupomar.
El interés no es gratuito. Desde fines del siglo pasado el atún nacional enfrenta restricciones no arancelarias en Estados Unidos, como el sello Dolphin Safe. Durante décadas, el gobierno de EUA ha bloqueado la entrada de atún mexicano al argumentar malas prácticas de los pescadores del país. Ahora, con la renegociación en puerta, la diversificación parece obligada.
Grupomar y otras empresas como Terana y El Yucateco —que también obtuvieron el certificado— se alistan para extender sus ventas a otros países como Qatar, Emiratos Árabes Unidos y Kuwait, incluso a partir de 2017. Estas empresas forman parte del sector de conservas alimenticias del país, que actualmente envía 85% de sus exportaciones a Estados Unidos, algo que motiva aún más su deseo por explorar otros mercados.
Jonás Murillo, director general de la Cámara Nacional de la Industria de Conservas Alimenticias (Canainca), asegura que unas 30 compañías más de su gremio están tramitando el mismo certificado sin importar la distancia, pues llevar productos a mercados lejanos es menos complicado de lo que se piensa: “Da lo mismo exportar una lata a Estados Unidos que a Europa o Asia”.
“La logística es menos exigente para los productos en conserva, aunque sí es importante cumplir con todas las normas internas de cada país, como las de etiquetado; en Europa la normatividad es muy estricta en cuanto a conservadores y aditivos”, agrega Juan Carlos Anaya, director del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA).