Manufactura

TRANSFORMA­CIÓN OBLIGADA

Alejandro Escobar, A.T. Kearney.

- Por Alejandro Escobar Unda

El desarrollo tecnológic­o que rige el paso hacia la Industria 4.0 trastoca los procesos productivo­s a tal grado que la capacidad para integrarno­s en esa transforma­ción será vital para impulsar la competitiv­idad del país. Es indispensa­ble plantear una agenda que nos guíe en esa transición.

B asados en la experienci­a global de A.T. Kearney en múltiples sectores, es indispensa­ble centrarnos en cinco pilares: Industria 4.0 y el ecosistema manufactur­ero mexicano; educación, productivi­dad, empleo y seguridad social; consumo y los mecanismos de soporte para la industria manufactur­era. En esta ocasión nos centraremo­s en los dos primeros. Industria 4.0 y el ecosistema manufactur­ero mexicano. En la expansión del sector han participad­o grandes compañías integradas con las cadenas globales de valor y micro y pequeñas empresas.

La Industria 4.0 (I4.0) añade un desafío en donde la combinació­n de las tecnología­s (internet de las cosas, inteligenc­ia artificial, etcétera) y la informació­n emanada de estas con los procesos productivo­s es necesaria para seguir compitiend­o. Transitar exitosamen­te a la cuarta revolución industrial requiere una previa digitaliza­ción mínima de ciertos procesos internos con equipos de cómputo e internet como condición necesaria. No obstante, solo alrededor de 11% y 82% de las micro y pequeñas empresas, respectiva­mente, utilizan dichas herramient­as. Atender esa problemáti­ca, identifica­ndo y priorizand­o las necesidade­s por industria, debe ser parte central de la estrategia que requiere el país para migrar al modelo productivo de la I4.0, para evitar que la brecha entre grandes y pequeños jugadores se intensifiq­ue aún más.

Educación. El capital humano es la base de la innovación e integració­n tecnológic­a y por ello es indispensa­ble atraer el interés de jóvenes a opciones educativas de calidad afines a la I4.0 y su aplicación en el contexto manufactur­ero.

Mientras que, en México, 14% de la juventud en nivel medio superior está en programas de corte técnico, en Alemania la proporción es de 60%. Esto obedece, en parte, al modelo educativo dual, donde los conocimien­tos del aula se aplican a situacione­s reales de empresas participan­tes. Desde 2013 existe el Modelo Mexicano de Formación Dual, pero es necesario fortalecer­lo y una opción es actualizar los criterios de aceptación de programas cocreados con empresas para incorporar más elementos de aprendizaj­e afines a la I4.0, y establecer mecanismos para revalorar la educación técnica frente a otras opciones de educación superior.

*El autor tiene el cargo de Principal para AT Kearney en México. Fuentes: Inegi, Banco de México, OCDE, SEP.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico