EDITORIAL
Transición y productividad.
¿Cuál de los cambios que estamos viviendo en México es más importante?: el político, el comercial o el de la revolución digital y automatización.
Para cuando este editorial esté en sus manos, México tendrá un presidente electo y seguramente buena parte de las promesas de campaña empezarán a cobrar vida con el equipo de transición que armará el nuevo Plan Nacional de Desarrollo 2018-2024 o los programas de gobierno que modificarán organismos estatales, regulaciones, apertura o cierre de mercados, reformar las reformas, etcétera.
En paralelo, Estados Unidos seguirá empeñado en redefinir el TLCAN y su guerra arancelaria.
Y aunque México fue recientemente el invitado de honor del Hannover Messe, no significa que Alemania y la Unión Europea vean en el país un gran líder de la cuarta revolución industrial, sino a un cliente cautivo obligado a jugar en las ligas de la automatización, debido al encadenamiento global de sus empresas e industrias. En el evento se presentó el estudio de The Automation Readyness Index, que comparó 25 países en diferentes ítems que deben atender para entrar de lleno a la Industria 4.0. México se sitúa en el sitio 23. Uno de los rubros más destacados (si 19 es un lugar destacado) es el marco de educación para preparar a futuros profesionales con las capacidades suficientes para afrontar el cambio de paradigma de la productividad asistida por robots, la manufactura aditiva, el Internet de las máquinas, entre otros.
En esta edición invitamos a escribir a algunos de los líderes industriales para tener su perspectiva de los retos que debe solventar el país, pues como señala Abraham Tijerina, coordinador de estrategia de la Iniciativa Nuevo León 4.0, “la manufactura en México vive hoy su mejor momento, pero también enfrenta sus mayores retos”.
El desafío sin duda es solventar la productividad, a pesar de transformaciones, pero no con adaptaciones pasivas sino tratando de ir un paso adelante mediante la proactividad de buscar mejoras en los sistemas de producción y sobre todo con visión de negocio para encontrar los puntos clave para satisfacer la necesidad de socios, como apunta David Romero, especialista del TEC en manufactura avanzada, “los sectores manufactureros tienen la gran oportunidad de desarrollar una nueva visión operativa y de negocios basada en nuevas posibilidades brindadas por las denominadas tecnologías 4.0”. Al final, la respuesta a la transición está en el cambio que se realiza dentro de la planta, todo lo demás son solo circunstancias.