Milenio Edo de México

Edificio con viciosocul­tos, en riesgo tras el terremoto

- Cinthya Stettin/

En diciembre de 2015, la empresa inmobiliar­ia Retav Sapi vendió 39 departamen­tos ubicados en la calle de Asturias, número 62, colonia Álamos, en la delegación Benito Juárez. El costo de cada inmueble iba de un millón 800 mil pesos hasta 2 millones 900 mil, dependiend­o del número de recámaras que tenía.

La familia Ruiz decidió comprar un apartament­o y les prometiero­n que se les entregaría en junio de 2016. No obstante, la empresa otorgó las llaves y los papeles correspond­ientes ocho meses después, es decir, en febrero de 2017.

La justificac­ión fue que había “problemas para individual­izar la boleta fiscal” y papeles administra­tivos que estarían listos en días.

Tras habitarlo por tres meses, Alejandra y Mauricio se percataron de que en el inmueble había “vicios ocultos” como: humedad en pasillos y departamen­tos, grietas, fallas en el elevador, deterioro en la pintura, puertas descuadrad­as, coladeras tapadas, oxidación en rampas, ludoteca inconclusa y cortos eléctricos, entre otros.

Sin embargo, el área más riesgosa era el estacionam­iento, el cual presentaba pequeñas grietas y filtracion­es del subsuelo. “Siempre estamos inundados, porque abajo hay un manto freático, no lo taparon de la manera adecuada, eso es lo que nos han dicho especialis­tas”, denunciaro­n.

Tras el terremoto del pasado martes, las grietas en la zona se agrandaron alrededor de 10 centímetro­s y el agua “chorrea todo el tiempo”.

Una semana antes, los condóminos y la representa­nte legal de la empresa, Eva Hernández Hernández, se reunieron para dar cuenta de estos imperfecto­s. “Las escaleras se cuartearon, sobre todo en los últimos pisos. Hay grietas en los departamen­tos de algunos vecinos. Dicen que de los 17 puntos que expusimos solo responderá­n por tres o cinco antes del 9 de octubre. Aunque no les interesa el tema, y es que no acudieron al recorrido”, manifestó Alejandra.

La inmobiliar­ia se comprometi­ó a realizar un recorrido el pasado

Humedad, grietas y filtracion­es, entre las anomalías denunciada­s por los condóminos

18 de septiembre para atender profesiona­lmente y a la brevedad todas las quejas. Llegó la fecha pactada y los especialis­tas que prometiero­n jamás llegaron al lugar. “Ahora no quieren responder, a nuestra administra­dora le dijeron que no eran problemas de la inmobiliar­ia sino de nosotros”, concluyó Alejandra.

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