RELACIÓN HIDALGO Y EDOMEX
Alternancia podría modificar panorama político estatal
La alternancia en el poder que podría suscitarse luego de las elecciones del Estado de México podrían significar un efecto dominó que no solamente se vería reflejado en el proceso del 2018 a la presidencia de la República sino que podría verse reflejada en los futuros procesos en las entidades que, al igual que el Estado de México, no han tenido cambio político; siendo Hidalgo una de éstas, así lo consideró el profesor investigador en Ciencias Políticas de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), Guillermo Lizama Carrasco.
Opinó además que la alternancia en las democracias es buena para mantener la existencia de pesos y contrapesos. “Las democracias con mejores resultados dan ejemplos de cambio en sus gobernantes y eso ya les implica buscar un diseño más eficiente de política pública debido a que se puede perder el poder”. Detalló que esto es además una base para que la misma ciudadanía vea en el voto un método de rendición de cuentas, ya que a partir de la evaluación de los gobernantes y de su papel en la política pública el voto sería un mecanismo de rendición de cuentas donde el ciudadano evalúa el trabajo del gobernante y ya sea que lo premie por el buen trabajo o que lo niegue para darle la oportunidad a la alternancia.
Lizama Carrasco consideró que la alternancia en los próximos años se puede dar en muchas de las entidades del país, puesto que en muchos casos la ciudadanía comienza a valorar la importancia del cambio en el poder y del cambio político; asimismo, refirió que hay un claro agotamiento de los actores que han gobernado debido a que no han dado clara respuesta a los problemas de la sociedad y ya se vincula la efectividad de la política pública con los partidos políticos. “Esta sensación del voto de cambio político podría generar un efecto dominó que no solo podría repercutir las alecciones del 2018 si no que podría llegar hasta el estado de Hidalgo, y ello podría facilitar una alternancia y el cambio político que se da porque en el electorado y en la opinión pública existe la necesidad del cambio político”, subrayó.
Detalló que el cambio político en Hidalgo podría ser por algún actor de un partido de oposición y que pueda obtener votos de sectores distintos a los de su partido como ya ha sucedido antes y esto podría ser un efecto que también se vea en el Estado de México con el caso de Delfina Gómez Álvarez, candidata de Movimiento Regeneración Nacional (Morena), “ya que los electores de otros partidos podrían irse en apoyo a la candidata que significa la alternancia, no porque apoyen al partido sino porque se percibe una posible alternancia de cambio político”.
Asimismo, reconoció que en la entidad hidalguense ya se están experimentando procesos de alternancia y cambio político que ya se expresaron en las elecciones de 2016, “por ejemplo la configuración de los triunfos de los 18 distritos electorales de mayoría ya que encontramos que en este caso hay mayor apertura y diversidad, ese es un indicador de cambio; igualmente con las presidencias municipales, existen en los gobiernos locales una mayor cantidad de hidalguenses gobernados por partidos de oposición al partido que está en el poder, eso nos muestra indicadores de un agotamiento del partido político y sus actores en el poder”.