Rocket, otro ganador en el boyante fintech mexicano
México por mucho ya es el mercado número uno de fintech en Latinoamérica”, me decía Álvaro
Rodríguez Arregui, cofundador y managing partner de Ignia. Este fondo de capital emprendedor invierte desde hace ocho años en empresas de alto crecimiento dirigidas a la clase media emergente en México y acaba de inyectarle capital a la plataforma Rocket, junto con otros fondos como Angel Ventures, ON Ventures y GC Capital.
Fundada por Daniel Rojas, Rocket (www. rocket.la) es una empresa que, desde su portal, ayuda a buscar las mejores opciones de crédito. Su modelo es innovador, ya que vincula a quienes necesitan un préstamo (60 por ciento de ellos sin historial crediticio) con un conjunto de productos financieros con una mayor tasa de aprobación que la banca tradicional. A pesar de haber iniciado este proyecto en Colombia, cuando llegaron hace cuatro años a México (y al ver el enorme potencial local), cerraron sus operaciones sudamericanas y se enfocaron en nuestro mercado. El PIB de Colombia es igual al de la zona metropolitana de CdMx.
“Rocket nos interesó porque el proceso de búsqueda de un crédito es tortuoso, por lo que hay un pain point para el usuario cuando quiere acceder a un crédito. Por otro lado, el online
acquisition de los bancos en México es muy bajo —menos de 10 por ciento en México vs. 70 por ciento en EU. Rocket resuelve estos dos temas mejor que cualquier otro competidor. Parte de la razón es porque el emprendedor es de primera”, agrega Rodríguez Arregui. Ignia tiene dos fondos y 200 mdd de capital levantado; en su Fondo II ya realizaron siete inversiones en fintech y en su Fondo I otras dos.
Según el reporte 2017 de Fintech de PWC, “las 80 nuevas startups Fintech surgidas en los últimos 10 meses en México ponen al país a la cabeza de la carrera por la innovación fintech en América Latina y son un indicativo que esta tendencia irá en aumento”. De hecho, se espera que la inversión en estas empresas se duplique en este 2017 con respecto al año anterior.
Para Rodríguez Arregui hay una razón de fondo detrás de este boom: “los servicios financieros en México son malos, lentos y caros. Es como la olla de presión que destapas.. eso es México en términos de servicios financieros. Ha pasado en muchas otras industrias donde la tecnología y la actitud de servicio al cliente te permite dar una mejor oferta de valor al cliente, como Uber, Airbnb, Tesla, Amazon, etc”. También hay otros factores como la reducción en los costos (y acceso) a la tecnología, la mayor penetración de teléfonos inteligentes y una actitud más permisiva de los reguladores locales.
Lo cierto es que el boyante mercado local sigue creciendo, recibiendo jugadores internacionales e internacionalizando empresas locales mientras se termina de cocinar entre Banxico y Hacienda la Ley Fintech, que se presentará en septiembre.