Trump recula; apoya a la CIA en caso Rusia
La rectificación, antes de partir de Vietnam hacia el Asean en Filipinas
Donald Trump dio un nuevo giro ayer en la polémica respecto a la influencia rusa en los comicios presidenciales de EU en 2016 en los que resultó triunfador. El presidente estadunidense tuvo que dar un apoyo claro a sus servicios de inteligencia después de haber mostrado el sábado su absoluta confianza en el presidente ruso, Vladímir Putin.
Mientras en Danang, en la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) Trump se daba por satisfecho y avalaba los desmentidos de su par ruso sobre su posible injerencia en los comicios presidenciales de EU, ayer en Hanói, antes de partir hacia Filipinas, para una cumbre de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean), tuvo que desdecirse.
La razón estuvo principalmente en la dura y rápida reacción de los servicios de inteligencia, incluyendo a la CIA, y sus antiguos directivos, responsables del informe que acusa al presidente ruso de haber ordenado una campaña de intoxicación contra Hillary Clinton, candidata demócrata y rival de Trump en su carrera a la Casa Blanca. “Estoy con nuestras agencias… Creo lo que dicen”, rectificó Trump en la capital vietnamita. “Tal y como están lideradas, El republicano brinda con el presidente filipino, Rodrigo Duterte, y su esposa, Honeylet Avancena. Políticos demócratas de Nueva York, encabezados por el alcalde reelecto Bill de Blasio, pidieron poner freno a la reforma tributaria del presidente Donald Trump, para la que los republicanos en la Cámara de Representantes han presentado una propuesta que se someterá a votación la próxima semana. De Blasio criticó que, de salir adelante, ese plan fiscal beneficiará al “uno por ciento más rico” y “destrozará” a la clase media. Por su parte, la congresista Nydia Velázquez, alertó que la reforma tributaria “sacará” 1.5 trillones de dólares de los programas sociales Medicaid y Medicare, impulsados por el partido demócrata, y afectará especialmente a las familias, las personas mayores, los estudiantes y los profesores.
El senador Chuck Schumer apuntó que los nueve congresistas republicanos de Nueva York y los seis de Nueva Jersey “determinarán” con su voto si el proyecto de ley avanza. “Deben elegir entre sus estados o los intereses especiales de los ricos”, sentenció. La pérdida de deducciones en los impuestos locales y estatales contemplados en el proyecto de ley afectaría especialmente a Nueva York, donde 760 mil contribuyentes pueden enfrentarse a mayores pagos fiscales. EFE/Nueva York