Del gabinete de AMLO importan los que no están
Confunden fantasía con alucinación. Florestán
Alos dos días de su proclamación como precandidato, el martes 12 de diciembre día de la virgen de Guadalupe, Andrés Manuel López Obrador dio a conocer a los integrantes de su gabinete presidencial, cuyo principal mérito parece ser la equidad de género, ocho mujeres y ocho hombres, pero creo que ese es un análisis simplista, porque el género por sí solo no determina calidad.
De la lista hay algunos conocidos, la ex ministra de la Corte Olga Islas, que batalla con su formación y la amnistía al crimen organizado de su candidato; Esteban Moctezuma, secretario general del PRI en la campaña de Ernesto Zedillo, en 1994, su primer secretario, breve, de Gobernación y al final de Desarrollo Social; Javier Jiménez Espriú, ex funcionario de Obras Públicas y secretario general administrativo de la UNAM, y Héctor Vasconcelos. La constante de los demás es su ausencia de cargos públicos, sin experiencia y sin antecedentes políticos, ajenos a las políticas públicas, pero sin cola que les pisen, pero, sobre todo, no son de su partido ni de sus rijosos como Martí Batres, John Ackerman, Horacio Duarte, Pablo Gómez, Manuel Bartlett y Layda Sansores, por mencionar algunos.
El mensaje de este gabinete no es quiénes lo forman, sino los que no están, sus rijosos, y esa fue la señal de paz que Andrés Manuel quiso mandar fuera de su feligresía, cuyos votos necesita si quiere ganar las elecciones.
Dicho lo anterior, hay que apuntar, primero, que no hay ningún compromiso, de ganar el 1 de julio, de confirmar a este equipo; segundo, que de ganar y confirmarlos, que no fueran de transición para relevarlos por los duros.
También puede verse como una provocación, más que a Ricardo Anaya, al que ha ignorado, a José Antonio Meade, en el que ha centrado sus ataques para que éste haga público el suyo, como si ya lo hubiera definido en lo que comenzaría a pensar en caso de ganar la Presidencia.
Por cierto, López Obrador dejó vacantes las secretarías de la Defensa Nacional y de Marina por razones que desconozco, pero que aparentemente no le preocupa porque ha dicho que agrupará a las fuerzas armadas en una guardia nacional de la que él será el jefe.
Pero no lo sé.
RETALES
1. ACLARANDO. A lo publicado aquí ayer sobre la ausencia de Enrique Ochoa y Aurelio Nuño en el arranque de campaña de José Antonio Meade en San Juan Chamula, el presidente del PRI, el primero, me dijo que le fue imposible por tener que encabezar esa noche aquí el convenio de coalición con el Verde y el Panal, pero que sí lo acompañará;
2. GOLAZO. Toda vez que Cuauhtémoc Blanco no será el candidato de Morena-PES al gobierno de Morelos, como se habían prometido, irá el senador Rabindranath Salazar, el futbolista podría ir por el PRI; y
3. FRATERNAL. Y en Guanajuato la sorpresa es que el PRI nominaría a José Luis Romero Hicks, priista, hermano del senador panista Juan Carlos.