2017, un año muy complejo
Aun año de distancia, puedo ver cómo la mayoría de los analistas equivocó sus proyecciones; probablemente el error más relevante fue que los inversionistas suponían que la Reserva Federal sería más agresiva de lo que en realidad aconteció, y que el dólar seguiría revaluándose contra las principales monedas del mundo como había sucedido en 2016. El resultado del año demuestra que sucedió lo contrario, el dólar perdió terreno respecto a las principales monedas; por ejemplo el euro y el yen se revaluaron en relación con el dólar 13 y 3.5 por ciento, respectivamente, pero también el peso mexicano recuperó 4.75 por ciento.
Otra equivocación fue que ante la eventual agresividad que se esperaba de la Fed, el futuro de las bolsas no se veía muy prometedor y al final este año que termina ha sido uno de los mejores en resultados bursátiles. Las bolsas en EU están en máximos históricos, con rendimientos por arriba de 20 por ciento en 2017; en Europa lo mismo, también arriba de 10 por ciento, y en America Latina mejores aún. Brasil 26, Argentina 77 y Chile 33 por ciento; solo México tuvo 6 por ciento.
El mundo creció también más de lo previsto, las economías avanzadas por encima de 3.5 por ciento, lo cual no se veía desde hace muchos años; los países en desarrollo arriba de 5 por ciento, encabezados por China, 7 e India, 8; solo América Latina crece por debajo de 3 por ciento; no recuerdo que nadie haya previsto estos avances. También el precio del petróleo sorprendió, hace un año estaba abajo de 50 dólares el barril (WTI) y ahora está en casi 60 dólares.
El 2018 en lo general pinta bien para el mundo, tanto para los países desarrollados como para los emergentes; espero que ahora no nos equivoquemos.
Desafortunadamente para México el año entrante será difícil, atravesamos por una coyuntura compleja al tener que enfrentarnos con las necedades del presidente de la nación más poderosa del mundo, nuestro vecino barda con barda que no entiende razones, y desafortunadamente no tiene ningún aprecio por México, esta situación produce incertidumbre porque la amenaza es real ya que si cancela el TLC no nos va a matar pero sí nos va a lastimar. Además su reforma fiscal nos resta competitividad, en un momento donde por la fragilidad de nuestras finanzas públicas será difícil responder; por último, el año electoral también nos representa retos importantes.
Confío en que saldremos adelante; por lo pronto, mil felicidades a todos los lectores, que 2018 sea un buen año.