Hornean roscas de Reyes de la manera tradicional
Sin rellenos y en conservación del origen del alimento, desde el nacimiento de La Flor de Pachuca, hace más de 60 años, es tradición la elaboración de la rosca de temporada
La panadería La Flor de Pachuca, una de las de mayor tradición e historia en la capital hidalguense, ya se prepara para el Día de Reyes con la elaboración de la tradicional rosca, la cual conserva ingredientes originales y una preparación artesanal en horno de ladrillo.
Gustavo Vargas Velazco, propietario de La Flor de Pachuca, relató que desde muy pequeño estuvo involucrado en la panadería, ya que desde 1950 es un negocio familiar y lleva alrededor de 20 años a cargo del local ubicado en el centro de la Bella Airosa, en la calle de Vicente Guerrero.
Explicó que desde el nacimiento de La Flor, en 1951, es tradición la elaboración de la rosca de Reyes, “aunque la historia ubica que por ahí de 1890 otras panaderías comenzaron su comercialización en el estado de Hidalgo”.
Contó que el degustar una rosca en estas fechas es una tradición muy mexicana; “yo creo que como sociedad vivimos de las tradiciones, cuando somos niños es una vivencia muy especial y es importante conservarla porque es parte de nuestras raíces e identidad”.
Destacó que la forma en que la preparan también es muy tradicional, “utilizamos biznaga y horno de ladrillo, no la hacemos rellena porque respetamos la tradición del sabor del pan y esto obedece a conservar el origen de la rosca, con ella celebramos el nacimiento del niño Jesús”.
Recordó que en aquella época ya era una costumbre romana llevar en las caravanas pan. “Se dice que cuando los Reyes Magos hicieron su viaje y llegaron con Herodes, él les obsequió pan”. “Cuando los tres Reyes llegaron a Belem, que significa ‘casa de pan’, a celebrar el nacimiento llevaban consigo pan, además de los tres regalos que ya conocemos que son el incienso, oro y mirra”.
Gustavo detalló que el incienso era por nacer hombre, “el oro por ser rey y la mirra por el destino que tendría Jesús al ser crucificado, ya que simboliza la amargura”.
En este sentido, recalcó que a la hora que se disfruta de una rosca y toca partirla, “simbolizamos el acto que hizo Herodes a la hora
“Cuando los Reyes llegaron a Belén, a celebrar el nacimiento, llevaban consigo pan” “Al partir una rosca se simboliza el acto de Herodes de buscar al Niño Jesús”
de buscar al niño Jesús, en este caso lo representamos con un muñeco y por eso nadie quiere ser Herodes y encontrar al niño; cuando nos toca también estamos obligados a aportar algo para la fiesta, ese es el significado”.
Acerca de la cantidad de ventas, indicó que cada año varía, “nosotros preparamos según la demanda, pero puedo decir que año con año vemos que se mantiene la tradición y aumenta”.
Comentó que los días fuertes son el 5 y 6 de enero; “el movimiento apenas iniciará, pero hasta el momento lo vemos con buenas expectativas. El año pasado nos fue muy bien”.
Respecto al incremento de los precios, opinó que a la hora de celebrar estas fechas, las familias hacen un esfuerzo para otorgarles la ilusión a los niños, “y nosotros respondemos con calidad, un buen producto, sabroso para promover la celebración y disfrutar en familia”.
Reconoció que la situación económica si afecta, pero no los desanima a continuar con la tradición. “Estamos a la orden de la clientela, muchas personas ya nos conocen y a los que no, los invitamos a venir a La Flor de Pachuca, elaboramos roscas de diferentes tamaños y precios”.