TLC: voluntad política, la pieza que falta
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Qué falta para que terminar la renegociación del TLC? Solo unas cosa: “voluntad política” de las tres naciones involucradas.
En eso coinciden el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, y el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Juan Pablo Castañón.
También coinciden en que aunque en los hechos son pocos los acuerdos que se han alcanzado en las primeras seis rondas de negociaciones, es alto el grado de avance en las negociaciones de diversos temas y que en cuanto se abra la ventana de oportunidad y se registre la “voluntad política” de los gobiernos de las tres naciones, se registrará un efecto cadena y la mayoría de los temas podrán cerrarse.
El responsable de la negociación por parte del gobierno mexicano es sumamente cauteloso y prefiere evitar cualquier palabra que pudiera implicar una “fecha fatal”.
Sin embargo el cálculo de Guajardo es que puede lograrse la modernización del TLC, pero tendrá que llevarse la conclusión hasta que pasen las elecciones en México. Para el representante de los empresarios lo importante no es cuándo se concluirá la renegociación; les interesa se alcance un acuerdo de calidad para las tres naciones.
Castañón sostiene que no deben interrumpirse las negociaciones por los tiempos electorales en México, EU o Canadá. Guajardo tiene claro que el nuevo TLC tiene que aumentar y profundizar el comercio inter-regional para fortalecer el comercio entre las partes.
En conversaciones por separado con ambos, tanto el funcionario como el empresario se muestran confiados en que más allá de los discursos y declaraciones o tuits incendiarios del presidente de EU, Donald
Trump, o cualquiera otro de los altos funcionarios, las negociaciones de los equipos técnicos han sido productivas y permitirán que al final se logre un acuerdo positivo para todas las partes. En las últimas semanas el gobierno mexicano y el sector privado lograron avances notables en su interlocución con empresarios y legisladores que desean que se mantenga el TLC.
Guajardo asegura que aun para los temas difíciles será posible alcanzar acuerdos que beneficien a todas las partes.
Por supuesto hay algunos en los que México ni Canadá pueden aceptar lo que propone EU, pero sí se puede revisar la manera en que se deben alcanzar acuerdos benéficos para las tres naciones.
Por ejemplo en el caso del contenido regional, ya existe una propuesta que Canadá elaboró y que está siendo revisada por las industrias automotrices de los tres países.
Los avances no han sido significativos en cuanto a acuerdos firmados por las partes, pero el avance es relevante y solo falta, la “voluntad política”. Ojalá. m