Listos para abandonar la realidad
Videojuegos, películas, series de televisión, además de decenas de productos que consumimos a diario, esto sin dejar de lado el teléfono celular; apuntan cada vez más a una idea que en el pasado parecía lejana, pero que hoy parece ser una posibilidad muy cercans, un mundo virtual.
Con las innovaciones que se tienen en el área tecnológica a diario hacen posible que ya no solamente se pueda soñar con una realidad virtual donde literalmente se puede hacer lo que sea y ser quien sea, algo que casi diariamente se ve en las redes sociales, sino que estamos en la frontera donde lo virtual y lo real pierden los límites y las divisiones.
Productos como los visores de realidad virtual que convierten a tu teléfono celular en una ventana a otros mundos, además de poder explorar las zonas de la Tierra más lejanas sin dejar tu sillón; el Play Station VR, permite que con un visor y algunos aditamentos se pueda vivir de alguna forma los juegos para la plataforma de Sony; incluso la industria pornográfica ha echado mano de estas innovaciones de la realidad virtual para que el usuario interactúe de mejor forma con sus productos, sin embargo aún no se puede sentir en la realidad virtual, así que no se emocienen demasiado.
Sin embargo la idea ambiciosa de que estos mundos virtuales existan y puedan ser reemplazos de una realidad que ya no satisface las necesidades y gustos del hombre es un peligro latente y la más reciente cinta Ready Player One es una nuestra hermosa de una sociedad decadente a la que inevitablemente llegaremos si no tomamos el control desde un inicio.
La historia, originalmente creada por Ernest Cline para la novela del mismo nombre, detalla un mundo que ha sido aniquilado por la peor guerra que puede existir, una guerra económica entre empresas privadas, nadie en la historia conoce la maldad como aquellos que quieren que sigas consumiendo sus productos; lo que ha llevado a un consumismo sin límites que ha dejado a millones en la pobreza.
Sin embargo hay un escaparate para todo este dolor y frustración de la realidad, el virtual llamado “El Oasis”, donde además de poder hacer hasta lo imposible como escalar el monte Everest acompañado de Batman o llegar a lo impensable, como ser Batman; puede pensar lector que a pesar de que exista esta maravilla de mundo virtual no tendría tiempo de jugar y vivir en ese mundo por causa del trabajo, ahí es donde se equivoca ya que el mismo “Oasis” esla mejor forma de ganar dinero y comprar cosas, por lo que millones dr personas están conectadas entre sí por el juego más del 80 por ciento de su tiempo, una genialidad corporativa.
Entonces el mundo virtual se ha convertido en realidad para muchas personas, sin embargo morir en el juego puede hacerte perder todo lo que has ganado, razón por la que más de uno en el mundo real termina suicidándose al perder a su personaje o avatar en el “Oasis”, algo triste y a la vez un poco aterrador debido a la posibilidad de que el mundo en el que vivimos puede llegar a ese extremo y de que sean las mismas corporaciones las que orillan a la sociedad a vivir así, pero supongo que todo vale la pena al entrar al mundo virtual y ser el personaje que quieras ser, ya sea real o ficticio, como Superman o Napoleón Bonaparte, la gama es muy amplia y debido a ello en la cinta hay muchas referencias a la cultura popular y sobre todo en la historia de los videojuegos, no sólo por las apariciones de decenas de personajes como las ranas de Battletoads, Las Tortugas Ninja, Bigfoot; así como la gama de autos como el Delorean de Volver al Futuro y la moto de Kaneda del anime Akira, algo que como fanáticos siempre se agradece y se hace notar.
Como una adaptación cinematográfica de una novela es un trabajo increíble, los efectos, historia y desarrollo de los personajes cumple con su cometido de entretener, sin embargo siempre hay un público más exigente en las salas de cine y siempre piden más de lo que ven, es cosa de que nunca quedan conformes con el producto final, pero es una buena cinta que nos da un panorama de lo que puede llegar a ser el mundo, un filme que dejará satisfechos a más del 90 por ciento de la audiencia debido a que también siendo sinceros, sólo un fanático del libro pediría una mejor adaptación que fuera aún más fiel, pero esa población es muy baja, por lo cual vale la pena ver esta historia que nos lleva a un mundo increíble en el 2045 y que aún podemos llegar de mejor forma al inevitable futuro que está próximo a llegar.