Cae precio del aluminio por guiño de EU a Rusal
De acuerdo con el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, la decisión tiene como factor decisivo el impacto “en nuestros socios y aliados”
La administración Trump señaló que podría suavizar las sanciones contra Rusal, el productor ruso de aluminio, lo que envió al cielo los precios mundiales del metal, algo que el lunes desató como alivio una venta masiva con la que el precio del aluminio cayó hasta 10 por ciento.
El Tesoro de Estados Unidos dijo que si el multimillonario Oleg Deripaska, con vínculos con el Kremlin, vendió su participación de la compañía, la segunda mayor empresa de aluminio del mundo por producción, podría reducir o levantar las sanciones. También extendió por casi cinco meses el plazo para que los ciudadanos estadunidenses y los no estadunidenses liquiden sus negocios con la compañía hasta el 23 de octubre.
Desde que se introdujeron las sanciones contra Rusal el 6 de abril, los precios mundiales de aluminio aumentaron casi un tercio, lo que llevó a los líderes extranjeros, encabezados por el presidente francés Emmanuel Macron, a buscar que Donald Trump dé marcha atrás. Rusal representa 6 por ciento del suministro del metal en el mundo.
Steven Mnuchin, secretario del Tesoro de EU, dijo que el “impacto en nuestros socios y aliados” fue un factor en la decisión, y deja claro que las sanciones se dirigen a Deripaska, un ciudadano ruso al que se considera cercano del presidente Vladímir Putin. Otros oligarcas también resultaron afectados por las sanciones de abril. “Rusal sintió el impacto de las sanciones de Estados Unidos debido al entrelazamiento que tiene con Oleg Deripaska, pero el gobierno de EU no apunta a los trabajadores que dependen de Rusal y de sus filiales”, dijo Mnuchin.
El anuncio tuvo un impacto inmediato en la Bolsa de Metales de Londres, donde el precio del aluminio cayó más de 10 por ciento, para llegar a 2 mil 237 dólares por tonelada después de cotizar hasta en 2 mil 534 dólares por la mañana. En las últimas operaciones el precio cayó 8.5 por ciento, para llegar a 2 mil 278 dólares.
Adam Smith, ex asesor senior del Tesoro de EU y ahora en Gibson Dunn, dijo que la medida sugiere que el gobierno estadunidense reconoció el “impacto increíblemente amplio” de las medidas, que algunos sugirieron fueron más allá de lo que buscaba la administración.
La extensión del periodo de liquidación hasta octubre le daría tiempo al Tesoro para confirmar cualquier posible venta que haga Deripaska de Rusal, agregó Smith.
El grupo de países de la Unión Europea encabezados por París tenía planes de pedir a EU que considerara las consecuencias de las sanciones, que amenazaban con afectar a las industrias automotriz, aeroespacial y de otro tipo y a los productores de aluminio que dependen de Rusal como fuente de la alúmina, la materia prima utiliza para producir el metal.
Los precios de la alúmina subieron hasta 80 por ciento desde que se introdujeron las sanciones.
Macron y Angela Merkel, la canciller alemana, visitarán Washington esta semana, y se espera que se reúnan con Trump como parte de esfuerzos diplomáticos más amplios para suavizar las relaciones transatlánticas, ya tensas por los aranceles que planea Estados Unidos para el acero y el aluminio.
El nuevo anuncio del Tesoro marca la primera vez que Washington establece un plan de acción sobre cómo Rusal puede liberarse de las sanciones. “La marcha atrás de la imposición inmediata de sanciones a Rusal por parte del Tesoro de EU le da al mercado de aluminio un respiro muy necesario”, dijeron los analistas de Wood Mackenzie. “La extensión del plazo le permitirá a Rusal elaborar un acuerdo, lo que permitirá una transición ordenada en el mercado”.
Las nuevas sanciones —que se introdujeron en virtud de la Ley para Contrarrestar a los Adversarios a través de Sanciones— en efecto le prohíben a los ciudadanos no estadunidenses, así como a los estadunidenses, hacer negocios con empresas específicas y sus propietarios oligárquicos. Como resultado, Rusal y su empresa matriz EN + se encontraron efectivamente excluidos de los mercados globales.
Rusal no quiso hacer ningún comentario el lunes. Una persona cercana a Deripaska dijo que no estaba claro qué implicaría ceder el control y cuántas acciones se tendrían que vender. Cualquier cambio de propiedad del único productor de aluminio de Rusia sería coordinado con el Kremlin, dijo la persona.
Deripaska controla 48 por ciento de la compañía. Una empresa controlada por Viktor Vekselberg, que también está en la lista de sanciones, posee 26.5 por ciento, y Glencore es propietaria de 8.75 por ciento.
Dmitry Peskov, portavoz del Kremlin, dijo la semana pasada que una posible nacionalización del productor de aluminio “se debatía activamente” como parte de una serie de posibles medidas para mantener a la empresa en funcionamiento.
Rusal emplea a cerca de 700 mil personas y Moscú desea evitar despidos masivos o agitación. La compañía también tiene varias plantas de alúmina fuera de Rusia, entre las que se encuentra una en Irlanda, que es la más grande de Europa.
No está claro si el Kremlin toma el control de Rusal de forma efectiva y si va a satisfacer la demanda de EU de que Deripaska venda su participación.
Un vocero del Tesoro de EU dijo que el departamento “no puede especular sobre situaciones hipotéticas”. Dejó en claro que “el camino para suavizar las sanciones era a través de la venta y la renuncia al control por parte de Oleg Deripaska”. Información adicional de Kadhim Shubber en Washington.