“Soy un optimista testarudo”
Como secretario general de la ONU, Annan tuvo entre sus mayores logros los programas y políticas que puso en marcha para reducir la desigualdad interna de las naciones y entre los países, combatir las enfermedades infecciosas, fomentar los derechos humanos y proteger a los civiles de crímenes de guerra como genocidios.
Pero antes, como jefe de operaciones de paz de la ONU, Annan compartió la culpa del fracaso del despliegue de los cascos azules para impedir los genocidios en Ruanda en 1994 y en la localidad bosnia de Srebrenica en 1995.
Como titular de la ONU, participó en los esfuerzos de paz para reunificar isla de Chipre (entre turcos y griegos), presentando un plan que fue rechazado en un referendo por los grecochipriotas en 2004.
Se opuso a la invasión de Irak liderada por EU en 2003 y luego fue el primer enviado de la ONU en el inicio de la guerra de Siria, pero renunció después de que las potencias mundiales no cumplieran sus compromisos. “La ONU se puede mejorar, no es perfecta, pero si no existiera, tendrías que inventarla”, dijo a la BBC durante una entrevista por su 80 cumpleaños en abril pasado. “Soy un optimista testarudo, nací optimista y seguiré siendo optimista”, añadió.
Agencias/Nueva York