Toyota se resguarda en China ante crisis en EU
La disputa entre Pekín y Washington nubla el panorama, por lo que automotrices de Japón ya se enfocan en el mayor mercado global
Kana Inagaki/Tokio Para fortalecer su presencia en el mercado automotriz más grande del mundo, es decir, China, la principal automotriz de Japón considera compartir su tecnología y su conocimiento en la construcción de vehículos híbridos con compañías de esa nación en respuesta a una solicitud de Pekín, de acuerdo con dos personas cercanas a Toyota.
La compañía y la mayoría de las grandes automotrices japonesas planean aumentar la producción y las ventas en China mientras luchan contra la desaceleración del mercado de Estados Unidos, que fue un motor clave de crecimiento en la última década.
También enfrentan la casi certeza de una disrupción en las cadenas de suministro y a mayores costos, ya que Donald Trump, presidente de EU, reforma el Tratado de Libre Comercio de América del Norte y busca nuevos aranceles para las importaciones de automóviles de Europa, China y potencialmente Japón.
Pero los analistas dicen que Toyota es uno de los pocos fabricantes de automóviles que encontró un lado positivo, aunque solo sea temporalmente, en la crisis de la guerra comercial.
En agosto, las ventas en China de sus vehículos de lujo Lexus, que se fabrican en Japón, subieron 59 por ciento en comparación con el año anterior para alcanzar un récord mensual de 18 mil unidades después de que Pekín redujo sus aranceles de importación a las automotrices para abordar las quejas de EU sobre el comercio.
Las ventas totales de vehículos Toyota en China subieron 23 por ciento el mes pasado, mientras que las ventas totales de vehículos de pasajeros cayeron por tercer mes consecutivo debido a las inquietudes sobre la disputa comercial con Estados Unidos.
Otras automotrices que fabrican casi todos sus vehículos en China resultaron afectadas, el crecimiento de las ventas de Nissan se desaceleró para llegar a ser de 4 por ciento y las ventas de Volkswagen y Ford registraron una caída de 3.2 por ciento y 36 por ciento, respectivamente, en comparación con el año anterior.
Toyota, que históricamente tiene una presencia más fuerte en los mercados del sudeste asiático como Tailandia, se quedó muy por detrás de sus rivales VW y General Motors en la venta de automóviles en China. La compañía niega que su última expansión en China se impulsó por las preocupaciones sobre las políticas comerciales proteccionistas de Estados Unidos, pero los analistas dicen que la transición es oportuna. “Es inevitable que Toyota cambie a China con la fuerte desaceleración en EU”, dijo Masahiro Akita, analista de Credit Suisse. “También es perfecto para Toyota, ya que les ayudará a mantener su compromiso de producir 3 millones de vehículos en Japón”.
Si la disputa comercial entre EU y China perjudica las ventas de GM y Ford en China, CLSA espera que la participación de mercado que tiene Toyota en China suba de 4.9 por ciento a 5.2 por ciento en 2019, y las acciones de Honda y Nissan suban cada una de 6.1 a 6.5 por ciento.
China realizó un empuje ambicioso para convertirse en el campeón mundial de vehículos totalmente eléctricos para 2025. Pero los funcionarios del gobierno reconocen la necesidad de la tecnología híbrida de gasolina y electricidad para combatir la contaminación y buscan lazos más estrechos con el pionero del automóvil híbrido Prius.
Toyota también se benefició con la mejora en las relaciones entre Japón y China, ya que Washington aumentó la presión comercial sobre Pekín. En mayo, Li Keqiang realizó su primera visita a Japón desde que se convirtió en el primer ministro de China en 2013. En Japón también se reunió con Akio Toyoda, el director ejecutivo de Toyota. “En el pasado, temíamos que nos arrebataran nuestras patentes, pero ahora tenemos un grado de confianza con China”, dijo un ejecutivo de Toyota.
Si bien Toyota ve los méritos de una mayor competencia por los híbridos en China, lo que va a expandir el mercado para los vehículos, también confía en que sus conocimientos acumulados durante décadas sobre la construcción y la venta de híbridos no los podrán igualar fácilmente los nuevos participantes.
Sin embargo, los analistas advierten que la oportunidad de China podría convertirse rápidamente en un riesgo si la disputa comercial desacelera la economía china.
Los fabricantes de automóviles aún no toman una decisión sobre cómo abordarán el acuerdo recientemente renovado del TLC con México y la incertidumbre sobre si Canadá se va a unir.
El nuevo acuerdo entre Estados Unidos y México dicta que un mayor porcentaje de piezas de automóviles se fabrique en los dos países, y que los trabajadores ganen al menos 16 dólares por hora, medidas diseñadas para seguir fabricando en los EU.
Pero no hay mucha claridad sobre si los fabricantes de automóviles que no cumplen con las nuevas reglas simplemente se enfrentarán a la multa actual de un arancel de 2.5 por ciento o a otras condiciones adicionales, como un límite a la producción.
Los analistas dicen que también hay espacio para que la administración de EU ajuste la definición de lo que constituye el contenido producido localmente. Conforme a las normas actuales, los componentes que se producen en Japón se seguirían considerando hechos en EU si se ensamblan en Estados Unidos. “Lo que pueden buscar probablemente es ser los proveedores de partes que se importan a Estados Unidos para el ensamble local”, dijo Kurt Sanger, analista de Deutsche Securities.
no toman una decisión sobre cómo abordarán el nuevo TLC con México