Los retos de Nico Castillo
El delantero chileno saldrá a la banca en el partido contra León; es un hecho su presentación entrando de cambio
Apenas puso un pie de nueva cuenta en México y Nicolás Castillo percibió lo que espera el americanismo de él. Su nueva afición montó una verbena en el aeropuerto, cuando el chileno aún no se ponía la playera azulcrema. Un recibimiento que lo compromete a tener un alto rendimiento desde el primer partido.
Todo indica que la presentación de Castillo se dará este sábado en el estadio Azteca, el mismo campo donde jugó su último partido antes de irse a Benfica, aunque aquella vez fue en el bando enemigo. Nico ha llegado como una de las bombas del mercado invernal; América repescó a un tipo calado en México y que dio buenas sensaciones en tres torneos con Pumas.
Ahora, Nico pasa a un escenario distinto, uno en el que tendrá más calidad detrás de sí y junto a él mismo, ya no será la única estrella, sino que llega a un vestuario con tipos de su mismo calibre y que ya han alcanzado la gloria deportiva en el pasado reciente.
¿Qué deberá hacer Castillo? ¿Cuáles son los retos que deberá cumplir para corresponder a ese recibimiento que tuvo y al empeño que mostró la directiva para cerrar su fichaje? Fácil: goles, con eso pagará ambas muestras, aunque sigue en ese proceso de adaptación a la altura de la Ciudad de México, algo que se presume no le tomará mucho, pues ya pasó año y medio en estas condiciones.
Contra sí mismo
El parámetro inicial para medir a Castillo será el propio chileno. En su primera temporada en México (Clausura 2017) logró ocho anotaciones, una cuota bastante buena para los 11 partidos que disputó y para los recursos que tenía en ese momento Pumas, un equipo que se refugió en el andino y dependió en grado extremo de lo que fuera capaz de hacer en ataque. En ese torneo, Universidad no calificó a la Liguilla y el promedio de Nico en sus primeros seis meses fue de 0.72 goles por partido.
Al América le quedan 13 partidos por delante de la fase regular; dos más de los que pudo jugar en su primer torneo en México. Si todo sigue como está previsto, debutaría el sábado contra León, lo más probable es que sea entrando de cambio, porque Miguel Herrera ha señalado que sigue en un proceso de adaptación. En los últimos días ha priorizado el trabajo físico para que encuentre el tono lo más pronto posible, pero entraría entre los 18 jugadores convocados. Tendrá tiempo y partidos para rebasar esos ocho goles que anotó con Universidad en su primer semestre.
No ha tenido problemas para integrarse al grupo, todos le han recibido con afecto y se va dando cuenta que en el vestuario hay galones y liderazgo en varios futbolistas y que no se dependerá de él como pasó en CU.
Sus competidores
Es verdad que Nico ha llegado para ser referente en la ofensiva azulcrema, pero ya ha dado mensajes en los que ha quedado claro que jugará el que esté en mejor estado y que la titularidad se debe ganar en el campo y no de facto.
Con Henry Martín, Roger Martínez y Jérémy Ménez peleará la posición. El reto de Nico es
ASÍ LO DIJO
“Vengo a romperme la madre con el equipo, Miguel me ha hablado mucho y me ha dado a entender lo que es América”
“La presión de los goles no me la meto a la cabeza, yo me comprometo a dejar todo por el equipo, a buscar las victorias en cada partido, los goles vienen después”
“La competencia va a ser muy dura, todos los jugadores están en un nivel muy alto y al que necesite va a responder al cien”
Nicolás Castillo
Delantero del América
tener un mejor rendimiento que los otros tres jugadores que llegaron el año pasado al club, porque Oribe Peralta ya ha echado raíces en Coapa y su presencia en el cuadro titular ha venido a menos.
Martín llegó en el Clausura 2018, en su primer semestre logró ocho goles en 23 partidos. Roger aterrizó en el Apertura 2018, en seis meses anotó siete. Y Ménez fue un refuerzo estelar para el Clausura 2018, el francés jugó 16 partidos y marcó cinco.
El promedio de Castillo es más eficaz que los otros delanteros que tienen menos tiempo defendiendo la playera americanista; sin embargo, el presente del andino no es tan bueno, pues si llegó a América fue por la falta de actividad con el Benfica.
Castillo no promete una cifra goles, pero sí matarse por la causa, ha llegado para solucionar un déficit que ha acusado el cuadro de Coapa en tiempos recientes. Superarse a sí mismo y a sus compañeros son los desafíos que empezará a lidiar.