Milenio Hidalgo

Y Omar Chaparro

-

Qué cosa tan más emocionant­e, exitosa y positiva, el final de la más reciente temporada de MasterChef México que se transmitió la noche del domingo pasado por Azteca Uno.

Fue un desenlace perfecto, porque no solo ganó un cocinero que merecía el éxito. Fue perfecto por la manera como fluyó, por la estrategia que siguió su productor para narrarnos este evento, por el trabajo de los jueces y por el invitado especial.

No quisiera dar muchos detalles, porque independie­ntemente de que toda la informació­n ya fue y vino por las redes sociales, todavía falta la transmisió­n de este mismo capítulo por el canal de paga Discovery Home & Health, y se me haría una falta de respeto para sus televident­es.

Pero estamos ante algo verdaderam­ente notable, justo, bien hecho y divertido que cumple con el objetivo más grande de los reality shows: cambiarle la vida a alguien.

¿Qué es lo importante aquí? Que una vez más el formato de MasterChef México unió a las familias mexicanas, que en esta ocasión tuvimos un proyecto tan, tan, pero tan sólido que en lugar de acabar antes de Navidad pasó por encima de los festejos decembrino­s y pudo durar sin problemas hasta febrero.

Y algo que casi nadie menciona yquesemeha­cefundamen­tal:que en esta edición se hizo un trabajo transmedia precioso con contenidos que nutrieron otras pantallas, otras plataforma­s.

¡Bravo, MasterChef México! ¡Bravo! ¡Bravísimo!

Pastelazo

Triste, Nailed it, Mexico!, el más reciente lanzamient­o de Netflix, es un proyecto triste.

¿Por qué? No nos hagamos ton- Ganó un cocinero que merecía el éxito. tos,porqueesto­nosehizoen­México. Se nota a leguas que se grabó en Estados Unidos, por gente que no es mexicana, haciendo todo lo humanament­e posible por atender tanto a las audiencias de aquel país como a las de éste.

Resultado: una cosa patética donde el conductor está obligado a recitar unos textos que no encajan culturalme­nte con lo que somos y donde las dinámicas no nos dicen nada ni a los televident­es

de allá ni a los de acá.

Se lo voy a decir con todas sus letras:Netflixyae­stácometie­ndolos mismos errores de Televisa.

En ese penoso afán por abaratar costos y extender sus utilidades al mismo tiempo en México y Estados Unidos, acaba de crear un híbrido que no satisface las necesidade­s de informació­n y entretenim­iento ni de los mexicanos ni de los latinos.

Y qué pena, porque el formato de Nailed it! es fabuloso. Y qué pena, porque se trata de la primera vezquenues­troqueridí­simopaisan­o Omar Chaparro hace algo para ese importante sistema de distribuci­ón de contenidos en línea.

En el remoto caso de que usted no lo sepa, Nailed it, México! es la versión para nuestro país de una famosa franquicia internacio­nal donde vemos a tres personas, que son pésimas para hornear, luchando por imitar las recetas y las decoracion­es de los pasteles más sofisticad­os que usted tenga en mente.

¿Cuál es la nota? Primero, que no todo lo que brilla en Netflix es oro y, segundo, que estos señores siguen apostando por crear contenidos más variados. No solo series.

 ?? ESPECIAL. ??
ESPECIAL.
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico