¿Negrete la cruzazuleará?
En la hoy alcaldía de Coyoacán, en Ciudad de México, si algo cunde, además de la inseguridad, es el desmadre en el más puro estilo perredista. Digo, no es que los vecinos de la comarca esperáramos encontrar en el ex futbolista Manuel Negrete, que ha vivido de un gol y un pase filtrado, un verdadero estadista, pero cuando menos creímos que iba a hacer más grandes las calles para que cupieran los baches a los que por sus dimensiones y tupida disposición podríamos denominar cráteres.
Tapó baches, algunos nada más para salir en la tele y ya, además de pintar el edificio de alcaldía sin permiso del INBA, como si fuera la Casa del Tío Chueco. De ahí en fuera ha brillado por su ausencia, sobre todo en lo que se refiere a la disputa por los jardines del centro de Coyoacán donde, gracias a su buena administración, lo que impera es el caos: logró que los artesanos de la zona se injertaran en basiliscos del CNTE en la disputa por las plazas y jardines, restableciéndose así el viejo espectáculo de nocivos tumultos que ya se había erradicado.
La cosa es que con la aparición de un video donde Negrete explica que trae un lío tremendo porque el ex alcalde Mauricio Toledo (un viejo conocido nuestro formado por Los Chuchos y en particular por Raúl Flores, un sujeto que todavía de la paliza electoral que le aplicaron
Y mientras el alcalde de Coyoacán deja entrever que el que manda es Mauricio Toledo
insiste en ser el presidente del PRD en la capital, dicen, porque a mí no me consta nada de esto) acusado de acciones porriles, de baja estofa y transas sin igual (bien raro, todos sabemos que es santo y probo), le cobra un diezmo a los trabajadores de la alcaldía que, supuestamente, luego caen en las arcas del partido del sol azteca. Con razón se me hacía que en las llamadas de extorsión, la voz era del señor Toledo.
Y mientras Negrete deja entrever que el que manda es Toledo, pues en sus negociaciones dejó que hasta los de intendencia fueran de su gente, el PRD ya respingó al ritmo de cómo creen, que son electropuros, que no se vale, que por qué la desconfianza.
Este es el momento decisivo para meter el gol de chilena o que Manuelito quede en calidad de chalán de lo que según describió, hasta le fueron a gritonear a su casa. Acá esperamos, a ver si no la cruzazulea.