Empoderamiento equitativo dará carácter de excelencia a empresas
Para que una compañía sea realmente inclusiva, deben existir prácticas y programas que promuevan y faciliten la vida de mujeres y hombres que colaboran en un corporativo: experta
Hablar de incorporación a la perspectiva de género en la producción y análisis de las estadísticas nacionales a todos los ámbitos es una iniciativa del Centro Global de Excelencia en Estadísticas de Género, que ONU Mujeres y el Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía establecieron en el país.
De acuerdo con la experta Maricarmen Méndez, directora de Recursos Humanos en MSD México, para que una empresa sea realmente inclusiva, deben existir prácticas que promuevan y faciliten la vida de mujeres y hombres en un corporativo.
Para lograrlo, se enuncian las siguientes recomendaciones. Como primer punto, se pide marcar la diferencia. De nada sirve que una empresa sea abierta a la diversidad e inclusión si no se sabe capitalizarlo. Es importante adoptar el compromiso de crear equipos de talento mixtos equilibrados con presencia femenina, masculina e intergeneracional; acorde a los objetivos establecidos por la organización, atendiendo las diferencias y empoderando a hombres y mujeres desde la igualdad.
Como segundo punto, se aconseja visualizar el beneficio que trae la diversidad e inclusión; esto, al contar con un esa quema que valore la diversidad e inclusión en su personal que la habilite para ser más ágil, innovadora y mejor adaptada a las necesidades de los clientes, tomándola como una misión de cada empresa. En el caso de MSD, se ha apostado por la diversidad y la inclusión, que son esenciales para lograr resultados empresariales.
Herramientas
Asimismo, brindar herramientas para mejorar el posicionamiento, ya que una empresa inclusiva debe impulsar las habilidades y competencias de sus colaboradores, esto puede ser a través de programas corporativos de desarrollo. Por ejemplo, MSD cuenta con el “Programa de Liderazgo para Mujeres”, una propuesta global diseñada para apoyar el avance de las mujeres.
Aprender a negociar es otra de las claves, puesto que todas las empresas buscan la equidad, sin embargo, el género femenino debe estar listo para la apertura y comenzar a tomar riesgos, a decir lo que se quiere, y ser mejor negociadora de sí misma. Que no le de miedo expresar el deseo por un puesto de mayor jerarquía, por ejemplo.
Escucha de propuestas
Finalmente, la implementación de políticas corporativas acorde la actualidad, que promuevan la diversidad de género dentro de su personal, que tengan injerencia desde la contratación de nuevo talento, quienes podrán notificar sobre las ventajas de colaborar en una empresa diversa e inclusiva, donde la equidad de género empodere de la misma manera a hombres y mujeres para ocupar puestos directivos.
De acuerdo con Maricarmen Méndez, lo más importante es que la inclusión que promueven las empresas e instituciones, no se quede solamente en contratar a las personas que laboran en una empresa, sino que sus ideas, voz y opinión sean tomadas en cuenta dentro de la práctica.