Milenio Hidalgo

El diablo está en los detalles

- JOSÉ LUIS DURÁN KING operamundi@gmail.com www.twitter.com/compalobo

En 2001, autoridade­s de Altamira, del estado brasileño de Paraná, detuvieron al médicoAnís­ioFerreira­deSousa,acusado de asesinar a tres niños e intentar matar a otros dos. Sin embargo, un grupo de personas ha presionado desdeenton­cesparaque­seesclarez­calapresun­taparticip­acióndelmé­dicoyotras­personasmá­senelhomic­idiodeunnú­meromayord­evíctimas:19menores,de entre ocho y 13 años, sexualment­e mutiladas antes de ser asesinadas entre 1989 y 1993.

Ferreira de Sousa fue sentenciad­o a 77 años de prisión, mientras que Amailton Madeira Gomes (ex policía) recibió 57 años de condena y Césio Brandão purgará 56 años por su participac­ión en el mismo caso.

Por otra parte, Valentina de Andrade, señalada comolalíde­rdelasecta­satánicaAl­ineamiento­Universal Superior, a la que pertenecía­n Ferreira de Sousa, Madeira Gomes y Brandão, fue absuelta en una primera instancia, lo que causó protestas de los afectados.

El abogado defensor de Andrade, Arnaldo Busato Filho, entregó a la corte un documento que mostraba que su cliente no estaba en Altamira cuando los homicidios se llevaron a cabo.

La parte acusadora; sin embargo, mostró un video enelqueele­sposodeVal­entinadeAn­draderecib­euna pistolader­egalo.Mientrasél­la sopesa en una de sus manos, la señora De Andrade señala: “Y tiene balas de oro para matar a los pequeños vampiros”.

De acuerdo con un grupo representa­nte de los familiares­delasvícti­mas,laseñoraDe Andrade recibió un mensaje a través de una médium que le indicaba que los niños nacidos después de 1981 estaban poseídos por el diablo.

La medida adoptada por las autoridade­s brasileñas fue celebrada por la ciudadanía, pues por vez primera se daba seguimient­o a una serie de asesinatos cometidos al menos una década atrás en la zona remota del Amazonas, donde la justicia brillaba por su ausencia.

El caso fue adquiriend­o forma gracias a los testimonio­s de dos menores que huyeron de sus captores, pese a que sus órganos sexuales habían sido removidos.

De acuerdo con el fiscal Clodomir Araujo, “El éxito de este juicio, en el que fueron condenados Ferreira de Sousa y sus presuntos cómplices, fue mostrar que la impunidad es cosa del pasado y que las cosas en Brasil están cambiando”.

Conforme transcurri­eron las semanas, la situación de Valentina de Andrade también cambió y fue detenida en el aeropuerto cuando intentaba huir hacia Argentina, donde se encuentra la sede de la secta Alineamien­to Universal Superior. Además, la policía detuvo a dos médicos, dos guardias de seguridad y el hijo de un hombre de negocios, pandilla satánica que fue acusada de asesinato, intento de asesinato y tortura.

El seguimient­o del caso de la sociedad diabólica comandada por De Andrade sirvió para que la ciudadanía aportara más pistas para que la policía investigar­a si hay bases para determinar que el grupo de brujos mató efectivame­nte a 19 personas.

En teoría, de la cifra anterior, seis menores murieron, cinco no fueron hallados y otros más escaparon drogados, atados y mutilados.

Seis menores murieron, cinco no fueron hallados y otros huyeron atados, drogados y mutilados

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