Nerval es “el más romántico de los poetas franceses”
Hacia 1980, el poeta Víctor Manuel Mendiola impulsó la creación de una editorial como El Tucán de Virginia. Un hecho heroico si se toma en cuenta la dificultad de publicar poesía en México, pero también de hacerlo con una mirada puesta en los clásicos, sobre todo del siglo XIX y en ediciones bilingües.
Además, habría que sumar su interés por el trabajo editorial: el libro como objeto, en un verdadero homenaje a la poesía y a su importancia, contra lo que el mercado pueda decir al respecto. Así se encuentra su más reciente publicación, Las Quimeras, de Gérard de Nerv al, con traducción y ensayo de Ulalume González de León.
Hay en el volumen la posibilidad de múltiples lecturas, acercamientosdi versos a quienes considerado el “más romántico de los franceses”, dueño de una vida que contribuyó a la escritura de esa biografía: educado por su tío abuelo, porque su madre falleció cuando aún era un niño, fue periodista, aprendiz de imprenta y ayudante de notario, tuvo varias crisis mentales que lo llevaron al suicidio en 1855, según una nota de Rocío Cuesta.
Para acercarnos a Las Quimeras, Mendiola ofrece un ensayo y una traducción de Ulalume González de León, que él mismo se encontró hacia 1980 en el Suplemento “Sábado” de Unomásuno, sonetos que “me atraían y rechazaban, sentía su magnitud y magnetismo, pero al mismo tiempo su naturaleza heterogénea y con raras simetrías me alejaba de la sensación de entendimiento”, anota el editor.
Sonetos poéticos
La respuesta a esa dualidad que se planteaba el también poeta se lo ofreció la misma traductora: “sin saber cómo, un día Nerval descubre con esos soneto sala poesía comola forma menos analizable de la literatura, como una combinación de elementos en un objeto cuya belleza es transmisible”, escribía la poeta como prólogo a su traducción de los sonetos.
A la versión de Las Quimeras de Ulalume González de León, en la edición de El Tucán de Virginia hay que sumar las del soneto “El desdichado ”, d eX a vi er Villa urru ti a, Oc ta vio Paz, Juan Jo sé Arre ola, Salvador Elizondo, José de la Colina, Tomás Segovia y Gabriel Zaid, entre otros ensayos.