JLo, ¿o a quién quitarían?
Chico favor el que le hizo el alcalde de Los Ángeles, Eric Garcetti, a Jennifer Lopez al decir que le hubiera gustado verla incluida en la lista de las actrices nominadas al Oscar para que otras niñas latinas sintieran inspiración de verse reflejadas ahí. Digo que no fue ningún halago, porque aunque la actuación sí fue muy buena, no hay nadie a quien podríamos mover de semejante lista de ilustres actuaciones, como la de Charlize Theron en Escándalo o la de Renée Zellweger en Judy. Pedir que se le incluya por su origen puertorriqueño es un desdén al más grande logro de la carrera de esta exitosa mujer: acabar con el arquetipo de los personajes para latinas. Al menos en su caso.
A JLo no se le contrata cuando se necesita un prototipo de una mujer de cierto origen étnico. Se le llama, o se llama a sí misma, cuando hay un personaje que ella quiere hacer, que vale la pena, que tendrá cierta garantía de éxito en taquilla. Lo que importa es que ella es una mujer que va más allá del prototipo deseado por Hollywood, que no permite que tantas otras mujeres que no tengan la clásica belleza caucásica puedan realizar. Aunque sean infinitamente mejores. Jennifer pudo casi desde el principio.Selena fuesolounpunto de partida.
Eso es lo que pasa y sigue pasando en esta época de premios, que refleja tanto de quiénes somos y cómo pensamos. Claro que queríamos una mujer o cinco en la competencia por Mejor Dirección. Pero no queremos que quiten a mejores trabajos solo por el género de alguien. Es cambiar mentes, ver el trabajo desde su origen y no el resultado final. Créanme, el talento ahí está. Lo vemos cuando el mismo Stephen King grita a los cuatro vientos lo extraordinario que es el trabajo de la mexicana Issa López. Necesitamos más voces así, para que esas cintas se vean, entren al sistema y esto deje dese runa discusión sobre estatuillas y se vuelva una sobre oportunidades. Es lo único que hace falta.
Otra pelea es la exclusión de Taron Egerton por Rocketman como Mejor Actor. Está muy difícil imaginar a quién podríamos mover en esa categoría, pero me temo que yo hubiera votado por él antes que por Antonio Banderas. Opiniones subjetivas, sin duda. Pero actuaciones magistrales, todas envueltas por temas sociales de interés.
No sabía si reír o llorar cuando vi que medios en E U considera ron a Banderas como un“actor de color” nominado, no pensando que era afroamericano, pero supongo que en su ignorancia asumiendo que todo lo que hable español tiene el mismo origen étnico.
El caso es que siempre salen a relucir nuestros prejuicios y preferencias cuando nos ponen a juzgar a otras personas. En esta temporada TODOS somos críticos de cine. Y de inclusión social también.
Es muy difícil imaginar a quién mover para incluir a Taron Egerton por Rocketman