Contra el clasismo
Dietrich, Kollontai, Hellman y Michel fueron marcadas por la sociedad de su tiempo
Son cuatro mujeres que marcaron a la sociedad de su tiempo. Todas ellas en diferentes geografías, en un siglo que resultó harto complejo para su propia realidad: Marlene Dietrich, actriz alemana; Aleksandra Kollontai, diplomática rusa; Lillian Hellman, dramaturga y guionista estadunidense, y Concha Michel, compositora y cantante mexicana.
Figuras que se encuentran en el libro Mujeres en las tormentas (FCE, 2019), de Galo Mora Witt, quien se dio a la tarea de evocar y entrelazar las vidas de cuatro personajes que en el siglo XX “desataron las expectativas de la sociedad, al vincularse con el socialismo desde el feminismo”.
“Desde tiempos inmemoriales, el hombre encontró en su patriarcalismo misógino una manera de culpar a la mujer hablando de Edith, de Judith, de Eva… siempre como pecaminosas y eso es el origen también de una educación que ha ido permeabilizando
violencias, agresiones, marginaciones o esa palabra que debiera ser desterrada de nuestros códigos, como lo es tolerancia.
“Una palabra que ahora se dice con supuesta permisividad: hay que ser tolerantes. Me pregunto quién le adjudicó a quién el poder hegemónico para que la tolerancia pueda ser permitida, casi como un adorno, como un
obsequio, cuando de lo que estamos hablando es de derechos”, cuenta en entrevista con MILENIO quien además de escritor, compositor, antropólogo y político, fue ministro de Cultura de Ecuador en 2008.
Tiempo de mujeres
Galo Mora Witt reconoce que el libro parte de una militancia en el
pensamientodeizquierda,porello se habla, incluso, de mujeres que lucharon por el feminismo desde su cercanía con el socialismo y va más allá cuando tiene la certeza de que“nopuedeexistirunapancarta que no sea política. El ser político vive en cada uno de los seres”.
El acercamiento del escritor a cada una de estas mujeres se dio por diferentes circunstancias; en
Para el autor ecuatoriano, “por sobre la lucha de género está la lucha clasista. No invoco violencia de Estado, la detestamos, sino la comprensión desde hombres y mujeres para enfrentar la naturaleza del desvarío fascista, del desvarío totalitario, y la única manera de hacer es luchando en conjunto, aunque las reivindicaciones pasen por reglones específicos diferenciados”.
el caso de Aleksandra Kollontai al convertirse en la única mujer miembro del gabinete bolchevique y la capacidad para dictar normativas tan avanzadas que hoy todavía no se superan”.
“En el caso de Marlene pensaría en aquella respuesta que le da al emisario de Josep Goebbels, cuando la quieren convertir en icono del nazismo y ella dice, ‘no’; cuando le preguntan por qué, ella solo responde: ‘por decencia’”.
La vida de Concha Michel la conoció por Amparo Ochoa, quien alguna vez le confesó: “todas las mujeres que cantamos y que no queremos ser vedetes, sino cantar opinando, procedemos de Concha Michel”, siendo una verdadera cronista de su propia vida y de lo que ella observaba en México.