Recortes en Morelos
La Hacienda de Morelos ha salido triunfante en aplicar un recorte de 66 por ciento al presupuesto de la Secretaría de Turismo y Cultura (STyC) del Estado. A este error histórico habría que contra ponerle cifras del horror que vive la población ante el incremento de asesinatos, feminicidios, violencia intrafamiliar, secuestro, suicidio infantil y juvenil, deserción escolar, alcoholismo galopante, falta de planificación familiar, ausencia de educación sexual y un sin fin de carencias que hacen que 4 de cada 10 jóvenes del estado estén consumiendo alguna droga, o bien, sean ya parte de la maquinaria del narcotráfico.
Las tareas urgentes son todas y necesariamente pasan por la cultura y la educación. Si bien el Congreso local y Hacienda colocaron 26 millones de pesos en el fideicomiso de Turismo, el castigo a Cultura no podría ser sino un hachazo brutal que viene a deprimir la actividad cultural que nunca ha logrado salir de la precariedad más atroz. La reducción de 30 a 10 millones de pesos ha levantado la indignación del gremio cultural morelense que ha hecho circular una carta dirigida al gobernador Cuauhtémoc Blanco y a Margarita González Saravia, titular de la STyC.
En ella puntualizan que “si bien creemos que una adecuada estrategia de vinculación entre los sectores turístico y cultural puede generar un beneficio económico para los habitantes del estado, rechazamos rotundamente que se favorezca el desarrollo del turismo en detrimento de las necesidades culturales de la población morelense y de las fuentes de trabajo. La precarización de las condiciones laborales en el sector cultural perjudica a las y los artistas en todo el estado y vulnera su libertad de creación y expresión artística”.
Margarita González Saravia, pues, queda con este recorte prácticamente atada de manos, a pesar de un proyecto cultural ambicioso que comenzaba a enderezar el barco y definir rumbos. La sociedad morelense requiere que no se le nieguen sus derechos culturales constitucionales, hoy borrados del mapa.