Democracia sin violencias
Si bien aún nos encontramos en medio de una emergencia sanitaria, esto no debe detenernos para impulsar y promover unas elecciones libres de violencia política electoral, porque esta no se detiene, y menos bajo un contexto de proceso electoral. Por ello, se deben seguir dando pasos firmes en favor de una cultura democrática libre de violencias. Y para que ello ocurra, debemos involucrarnos desde los diversos frentes, porque diariamente nos encontramos expuestos a sufrir actos violentos, los cuales son utilizados en nuestra sociedad como un mecanismo para la resolución de conflictos y/o para obtener ciertos recursos. La violencia entendida como una anomia social, generalmente asociada al poder, la fuerza y la delincuencia.
En el caso de la violencia política, la entendemos como el ejercicio de la violencia que se da en la relación entre gobernantes y gobernados, pero actualmente es necesario ampliar los atributos del concepto a otros hechos como son los conflictos entre grupos en el gobierno, entre agrupaciones partidistas, o entre distintas organizaciones criminales que buscan controlar a candidatos y gobiernos. En estas acciones deben incluirse asesinatos, asaltos, incendios provocados, saqueos, daño o destrucción de la propiedad privada, secuestros, amenazas, asalto sexual, invasión de las oficinas de los competidores, entre otras. Es importante agregar los ataques verbales o escritos en distintas formas (como las virtuales) y remarcar que algunas conductas son violencia política basada en el género.EnMéxicolaviolenciapolíticaes muy amplia y preocupante, tan solo durante el proceso electoral de 2018 ocurrieron más de 150 asesinatos políticos (relacionados con el crimen organizado, de acuerdo a la SSPC y SESNSP).
Desde septiembre 2020 a febrero de 2021, se han registrado 73 crímenes políticos, en los cuales hubo 64 víctimas de homicidios. Pero la violencia política va más allá de la que proviene de la delincuencia organizada, los principales actos de violencia política provienen desde el poder público, y por eso es importante impulsaraccionesdeobservaciónelectoral, para evitar que el actuar de los diversosgobiernosocualquierrecursospúblicos altere el proceso electoral. Construir unaseleccionessinviolenciaseselnuevo y gran reto al que nos enfrentamos como democracia.