Zarazúa cumple y triunfa en su debut
Algo seguro en el Abierto Zapopan es que no se queda sin historias; siempre tiene algo que contar. Mientras se pueda leer Renata Zarazúa en el cuadro principal, el torneo genera una incertidumbre especial. La mexicana acepta los reflectores, y aunque el nerviosismo le cobra facturas, al final no decepciona y sale adelante.
Zarazúa y Kawa desafiaron la lógica del tenis durante todo el primer set. 10 quiebres seguidos llevaron al 5-5 que después desencadenó en un tiebreak. El ritmo del parcial se mantuvo en el desempate y todo se convirtió en un concurso de quién podía hacer más puntos con su servicio.
Cuando Renata tuvo su cuarto set point, la mexicana y la polaca se enfrascaron en el punto del partido. Zarazúa sobrevivió gracias a su mejor golpe: el revés. Se compró varias vidas desde el fondo de la pista. Cuando por fin llegó el error no forzado de Kawa, el 30 por ciento del aforo en la Cancha Central estalló en júbilo, al igual que la mexicana.
El primer set se convirtió en el partido. Lejos de que fuera un trámite, Zarazúa saltó a pista con otra confianza y lo llevó al marcador. Ganó presencia con su servicio, continuó aprovechando los errores de su rival y se permitió uno que otro lujo. Al final, logró cerrar el encuentro con un 6-0 en la pizarra para meterse a octavos de final.
Fue una jornada demasiado larga en todos los sentidos. El primer compromiso del día ya auguraba que estaba por llegar un maratón. Coco Wandeweghe y Mihaela Buzarnescu se enfrascaron en un duelo que llegó a las tres horas y que resolvió la rumana 7-6(4), 6-7(5) y 6-2.
La única que tuvo una noche relativamente tranquila fue Ana Karolina Schmiedlova. La eslovaca superó a Nao Hibino con primer set cómodo que resolvió 6-1 y un segundo parcial que resolvió 7-5 en casi una hora.
En el dobles, la mejor sembrada, Nadia Podoroska, tuvo su estreno en el Abierto Zapopan con una remontada de la mano de Sara Sorribes.