Milenio Hidalgo

“No quería vacunarme pero ya que sea lo que Dios quiera”

Adelaido es maestro pensionado de Petróleos Mexicanos. Cuenta que no se quería vacunar contra el covid-19 porque tenía temor, pues escuchaba por aquí y por allá los muertos.

- ALEJANDRO REYES ÁLVAREZ

Adelaido, de 62 años, un hombre bajito, delgado y de piel tostada dice que se vacunó contra el covid-19 porque viaja mucho a Estados Unidos y debe comprobarl­e a los gringos que está inmunizado.

Originario de Progreso de Obregón vive en Pachuca desde hace 15 años y es uno de los miles de adultos mayores que acudieron a las instalacio­nes de la Feria a recibir la vacuna de Pfizer.

Adelaido Avilés no miente. Lleva su mano derecha a la bolsa del pantalón, saca su teléfono celular, lo sostiene con la mano izquierda, busca la galería y muestra las fotografía­s de su último viaje a Seattle, Estados Unidos.

Fue en diciembre del 2020, apenas hace tres meses. En las imágenes del dispositiv­o móvil hay paisajes con nieve, luego aparece Adelaido sosteniend­o nieve entre sus manos, otra imagen, más nieve blanca y en una fotografía se ve a su es exesposa frente una camioneta de color rojo. Estuvieron una semana en la montaña, entre la nieve a varios grados bajo cero.

A Adelaido le gusta viajar, ir de compras y pasear. Dice que ha viajado mucho a Nueva York, a Atlanta y que incluso se ha ido a Houston en su auto. Cuenta que una vez que reciba la segunda dosis de la vacuna contra el covid volverá a Seattle a visitar a sus amigos y familiares. Lo hará en abril.

Pero antes de eso está acá, en el recinto ferial, al sur de la ciudad, en uno de los cuatro espacios que se destinaron para la vacunación, rodeado de adultos mayores como él, hombres y mujeres, sentados en sillas, espera por 30 minutos para ver si no tiene alguna reacción a la vacuna que recién le acaba de poner una enfermera del Seguro Social.

Adelaido es maestro pensionado de Petróleos Mexicanos. Cuenta que no se quería vacunar contra el covid-19 porque tenía temor, porque escuchaba aquí y allá los muertos que ha salpicado la enfermedad. En Hidalgo suman más cinco mil 500 en 82 municipios los últimos 11 meses, el virus aún no ha cobrado vidas en Nicolás Flores y Eloxochitl­án.

-Yo nomás me la puse porque viajo mucho Estados Unidos y me la piden, si no no me hubiera vacunado.

-Ahora que ya lo vacunaron ¿cómo se siente?

-No pues me siento bien, normal, estoy muy bien.

-¿Y cómo ve la pandemia? -Yo lo tomaba a puro relajo pero ya hasta que le pegó a mi familia ahora sí ya lo creí, yo pensaba que era pura mentira y no, hasta que no nos pegó en la familia.

Entonces Adelaido cuenta que Esperanza su media hermana se contagió de covid y su exesposa Elvia Escamilla también, que no fueron hospitaliz­adas, que se atendieron en casa y que ahora están bien.

El profesor jubilado dice que no creía en la enfermedad porque platicaba con sus amigos y ninguno de ellos conocía algún caso. Volvían a encontrars­e y nadie sabía de alguien contagiado.

Se reunían de nuevo y nada, pero el virus hizo lo suyo y se abrazó a los cuerpos de su exesposa y su media hermana. Después siguieron sus amigos.

Cuenta que su ex mujer tuvo todos los síntomas del covid: dolor de cabeza, fiebre e insuficien­cia respirator­ia, que le tuvieron que poner oxígeno y debía estar boca abajo para poder respirar, que primero la atendieron en su casa y después la llevaron a la Ciudad de México hasta que se recuperó.

-¿Y su esposa ya se vacunó? -Ella ahorita todavía no se vacuna, en el municipio donde ella vive, en Tezontepec de Aldama, todavía no hay vacuna pero sí se la va a poner.

-¿Qué opina usted de la pandemia?

-Pues no sé de dónde venga esta enfermedad pero sí está muy difícil la situación.

-¿Y cómo la ha pasado durante la contingenc­ia sanitaria?

-Yo he seguido mi vida normal, salgo bien protegido y como vivo solo.

-¿No se ha quedado resguardad­o en su casa?

-No yo sí salgo, voy a la Ciudad de México, salgo a Puebla, pero bien protegido.

-¿Y cómo se protege? -Con el gel antibacter­ial y con las mascarilla­s.

Adelaido vive en Parque de Poblamient­o, tiene tres hijas y un hijo. Su ex esposa vive en Villa de Tezontepec y en ocasiones va a visitarla, se queda dos o tres semanas con ella aunque ahora que tuvo covid no ha ido. Es un hombre precavido.

Dice que él ve bien que se vacune a los adultos mayores contra coronaviru­s, que es gracias al gobierno aunque aclara que lo hace con los impuestos que pagan las personas.

Ya en confianza y mientras espera sentado a que pasen los 30 minutos para ver si no tiene ninguna reacción al biológico cuenta que sus hijos no querían que se vacunara contra el covid.

-¿Por qué no querían que se vacunara?

-No sé.

-¿Qué le decían?

-No te vacunes pa’.

¿Y usted qué pensaba?

-Yo no quería pero ya al último dije: no pues ya que sea lo que Dios quiera.

 ?? J. SÁNCHEZ ?? No tomaba la pandemia en serio, pero su media hermana y su ex esposa se contagiaro­n .
J. SÁNCHEZ No tomaba la pandemia en serio, pero su media hermana y su ex esposa se contagiaro­n .

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico