Félix y el INE, la doble caída
La disputa entre Morena y el Instituto Nacional Electoral (INE) por la candidatura de Félix Salgado Macedonio acabará, en el escenario más previsible, con la caída de los dos últimos. Un candidato sin registro y una institución condenada a su extinción inminente.
Aunque el Tribunal Electoral validó la decisión del INE de sancionar el incumplimiento de Morena en Guerrero y Michoacán, cuestionó también la sanción impuesta a los precandidatos: negarles el registro. Sin embargo, los magistrados dejaron al INE la decisión de reconsiderar la sanción o, incluso, volver a imponer la original.
El 25 de marzo, nueve de los 11 consejeros del INE coincidieron en que Salgado Macedonio en Guerrero y Raúl Morón en Michoacán incumplieron con la orden de presentar a tiempo su informe de gastos de precampaña.
Siete de los consejeros votaron por negarles el registro y cuatro votaron a favor.
Para que Salgado Macedonio y Morón recuperen el registro, al menos dos de siete consejeros tendrían que cambiar el sentido de su voto. Por supuesto que existe esa posibilidad, siempre pueden alegar que los magistrados los convencieron de aplicar una sanción menos rigurosa y, en palabras llanas, dar una maroma legal.
Por eso la suerte de Salgado Macedonio depende de cómo voten: Lorenzo Córdova Norma de La Cruz Carla Humphrey Ciro Murayama Dania Ravel Jaime Rivera Beatriz Zavala Lo previsible es que ratifiquen la sanción, que Morena tenga que nombrar a otro candidato o se quede sin él y que, en consecuencia, el INE sea condenado a desaparecer. Una doble caída.
La mayoría de Morena en la Cámara de Diputados puede de inmediato concretar su intención de eliminar al INE y sustituirlo por otro organismo lo que, si ocurre, también podría aprovecharse para revisar esa estructura que ha vuelto a las elecciones en México de las más caras del mundo.
Que puede salir mal el experimento legislativo y engendrar un monstruo legal que afiance el monopolio político de Morena y sus aliados, también es cierto. De hecho, seis de los 10 partidos que compiten en junio son afines al presidente López Obrador: Redes Sociales Progresistas, Fuerza por México, Encuentro Solidario, Partido del Trabajo, PVEM y Morena.
Es muy difícil que la coalición opositora del PRI, PAN y PRD pueda siquiera mermar la nueva hegemonía política en construcción. Mucho menos lo podrá hacer Movimiento Ciudadano (excepto a nivel regional, como en Jalisco, donde han construido su propia hegemonía local).
Las implicaciones son difíciles de prever, en particular en Guerrero, donde Morena y sus militantes anunciaron que no permitirán que se lleve a cabo la elección si no se le restituye la candidatura a Salgado Macedonio, lo que se ve difícil por las razones expuestas, pero la suerte ya está echada.
Lo previsible es que Morena se quede sin candidato y el instituto sea condenado a desaparecer