Un año de emergencia
Enfermera narra apatía de la sociedad para cuidarse
Sin deseos de dar su nombre verdadero por temor a posibles represalias, una enfermera que tiene 30 años de servicio y que trabaja actualmente en el Hospital General de Pachuca, asegura que “a un año de la pandemia está saliendo lo peor como seres humanos” ya que hay apatía en la sociedad por priorizar las medidas sanitarias y en el personal del sector salud, sobre todo las nuevas generaciones que se preocupan más por el bono económico que reciben, que por la pasión por ayudar a sanar a las personas.
Asegura que de su parte lo único que pediría es que hubiera el suficiente material y elementos de protección para el personal, “ya que está escaso en el Hospital General de Pachuca y ni a guantes especiales llegamos”, dice Martina, como se nombró para esta entrevista.
Lamentó que está saliendo lo peor como seres humanos a un año de que llegó esta pandemia y de los trabajadores del sector salud “porque tal vez ya estemos cansados, pero solo se escucha que si el bono económico les llegó a unos y otros no, o que al que le llegó no le correspondía”.
“A título personal considero que no necesitamos un bono, creo que las nuevas generaciones están errando en ese sentido porque nosotros recibimos un sueldo, pero desgraciadamente nos tocó vivir esta pandemia y lo tenemos que superar y para eso nos preparamos y nos rentamos”, explica Martina.
Aditamentos necesarios
Lo que sí considera necesario es que el sector Salud del estado les abastezca de aditamentos necesarios para evitar los contagios de covid-19, que ya ha sesgado la vida de más de 5 mil personas en la entidad, que son parte de las necesidades que deben tener para cumplir con su trabajo día a día contra el virus.
“Los que nos dedicamos a la medicina amamos lo que hacemos; debemos de sentirnos afortunados porque tenemos trabajo, pero en lo que sí creo que debemos de estar preocupados es en que se nos den los aditamentos necesarios para realizar nuestro trabajo porque los cubrebocas son adquiridos de forma personal, así como las caretas y googles que sean de buena calidad, ni hablar de los guantes que deben ser especiales, pero son de caucho si bien nos va; estamos llegando a la escases en el Hospital General de Pachuca y espero que puedan dar esto que realmente es indispensable tener para realizar nuestro trabajo”, explica Martina.
De igual manera, refiere que este problema se agudizó más porque se atendieron a todos los pacientes que llegaban “y no se les cobró un solo peso”, incluso expuso que llegaban familias de altos recursos “y hasta políticos y candidatos llegaron acá para atenderse, pero tampoco se les cobró, a nadie, a menos que no hubiera un medicamento, ese sí se les solicitaba”.
Así también, agregó que acudían al nosocomio personas derechohabientes del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), así como del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), quienes preferían atenderse en el Hospital General de Pachuca, mismos que fueron recibidos para su seguimiento, lo que provocó el déficit de material y la poca posibilidad de recuperar el material que se requiere para seguir atendiendo a pacientes covid-19.