Los maestros de lo fantástico
Por alguna razón que desconozco la editorial RBA ha decidido titular “Maestros del fantástico”, en vez de “lo fantástico”, una colección de clásicos con cubiertas ilustradas inspiradas en las primeras ediciones, pasta dura con motivos diversos basados en modernismo, art déco y Arts & Crafts, con el oro como signo de distinción y tonos que alternan a cada título rojos, verdes y azules.
Esta auténtica biblioteca del siglo XIX abre con una doble entrega: La máquina del tiempo de H. G. Wells y la clásica Drácula de Bram Stoker. Si usted ya comenzó a salivar, le adelanto otros títulos que van de las previsiones distópicas a las fantasías científicas, de los monstruos humanoides a las mil caras del terror y del caos de la imaginación a la irrupción de lo sobrenatural en el mundo real.
La colección abarca 70 libros con apariciones semanales del agosto en curso a enerode2024yfigurantítuloscomoFrankensteindeMary Shelley, El gato negro de Edgar Allan Poe, El mundo perdido de Arthur Conan Doyle, El fantasma de la ópera de GastonLeroux,AvatardeTéophileGautier,Unavueltadetuerca de Henry James y El Horla de Guy de Maupassant.
Jules Verne, H. P. Lovecraft, Edgar Rice Burroughs, Anatole France, Jack London, Robert Louis Stevenson, Oscar Wilde, E. T. A. Hoffmann y Sheridan Le Fanu son otros autores que irrumpen en esta colección, que incluye ilustraciones de artistas como Harry Clarke, Alvim Corrêa, Harry Rountree y Nino Carbe, cuyas visiones derivadas de estas historias han sobrevivido más de un siglo.
Como toda colección con estas características, la inclusión de algunas obras provocará debate sobre su pertenencia al género exhibido, “lo fantástico” en este caso (es horrible eso de “el fantástico”), y quizá para normar criterio sirva asomarnos a la definición del maestro Tzvetan Todorov en su Introduction à la littérature fantastique (Éditions du Seuil, 1970): “Lo fantástico es la duda experimentada por un ser que no conoce más que las leyes naturales frente a un evento en apariencia sobrenatural”.
Van del caos de la imaginación a la irrupción de lo sobrenatural en el mundo real