¿Cuánto le importa a Marina del Pilar el vino mexicano?
Hace unas semanas que los viticultores del Valle de Guadalupe en Baja California arrancaron una campaña en medios y redes con el nombre “Rescatemos El Valle”.
En estos días varios compañeros han dedicado sus espacios a mostrar con datos cómo nos estamos acabando a la zona vitícola más importante del país. Una que da trabajos, que produce un vino reconocido en el mundo, que atrae turistas.
En los últimos seis años yo he escrito en este espacio un puñado de columnas relatando la grave situación de El Valle con el título: ¿A quién le importa el vino mexicano? Ésta se llama de otra manera.
Desde la campaña, la actual gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila, prometió que atendería la situación y que sería, de hecho, embajadora de El Valle, la gobernadora del vino. Y como lo reconocen los agricultores y productores de vino de El Valle, es cierto que ha existido una atención, algunas conversaciones,quenotuvierondurante muchosmuchosaños.Esmás,enabrilde 2022dijo:“quequedeclaro,nuestrovalle no va a convertirse en el antro más grande de Baja California”.
Pero El Valle está en una emergencia. Y sí, sí es un antro grandotote.
No hay tiempo. Si las autoridades no intervienen ya, en serio, YA, el deterioro, la falta de respeto de empresarios de todas partes a la vocación agrícola y de conservación del Valle de Guadalupe no sedetendrá.Estánlistosparaconvertirlo en el mayor antro gracias a la omisión —y complicidad— de algunas autoridades, en su mayoría municipales.
Ya lo vimos el año pasado cuando quisieron llevar a Christian Nodal, lo que hubiera sucedido si no fuera por la intervención del gobierno federal.
¿Cuántos conciertos faltan para que alguien haga algo? ¿Cuántos antros? ¿Cuántos hoteles con cientos de habitaciones? ¿Cuántas hectáreas menos para sembrar vid? ¿Quién querrá ir al valle cuando no se haga vino? ¿Cuánto pueden aumentar el precio de una hectárea para que sea imposible sembrar?
No va a estar fácil. Muchos intereses que nada tienen que ver con la agricultura o el vino han inundado el lugar poniéndolo en la situación que está hoy. Intereses empresariales mezclados con lo peor de la política.
Pero de eso se trata gobernar, gobernadora, de enfrentar esos intereses. Es la horadecumplirloprometido,dehacerse la gobernadora que protegerá e impulsará el vino mexicano. Será un gran logro.
Y es hoy, mañana será demasiado tarde.