Turnan proyecto de Parque Central
no de los iconos más importantes, significativos y representativos, de entre las tradiciones tapatías en torno al turismo, es el carruaje galante y señorial -tirado por corcelesque la cultura popular bautizó aquí como “Calandrias” por su semejanza con los colores de aquella hermosa ave.
Las calandrias son sinónimo de folclor y forman parte del imaginario, indispensable e inmarcesible, para aquellos que visitan la ciudad o aún para quienes vivimos en el cotidiano existir en esta tierra pródiga, rica en aroma a tierra mojada y símbolo cultural, por antonomasia, del ser nacional.
Estos carruajes de fantasía y abolengo merecen la gracia de la permanencia en virtud de haberse convertido y constituido, de facto y de jure, en signo emblemático del paisaje urbano en el centro histórico de Guadalajara, como también pasa en otras y cosmopolitas urbes en el mundo.
Andar en Calandria, a través del entramado de la ciudad, es uno de los placeres más emotivos y elocuentes que podemos gozar como experiencia vital al visitar el Centro. Escuchar al calandriero contar la historia de los edificios y los lugares, entre sus versiones y diversiones, hacen del paseo un verdadero festín de anécdotas y amenidades. Pasar el tiempo sobre una calandria nos conduce al paraíso de la felicidad y nos lleva de la mano a descubrir los encantos y secretos que guarda Guadalajara en el feliz galopar y en las herraduras de sus bridones.
Ahora que se ha planteado la ocurrencia infame de cambiar caballos vivos por caballos de fuerza motorizados -o aun eléctricos- se incurre en un tremendo y fatal error de concepto: Una calandria sin caballos no es una calandria y me declaro en contra de tal equívoco. Mejor será pensar en que la autoridad debe destinar recursos para generar ventajas a quienes ejercen el oficio de calandriero y, más, para dar trato especial a los equinos, para propiciar condiciones que permitan que los animales cuenten con atención médica o estética y en conjunto accedan a beneficios de toda índole.
No, no acepto la intromisión de los motores ni pilas en la tradición. Una medida de tal naturaleza atenta contra los más elevados motivos de la identidad tapatía y contraviene los principios de la filosofía de la movilidad no motorizada. Es, además, una idea totalmente descabellada.
Es por eso que las calandrias jaladas por caballos deben permanecer, para mantener y conservar el lujo de su presencia e hidalguía. ES más, quiero proponer aquí y para que quede constancia escrita, una idea que ya expuse ante el grupo 100 por Jalisco, en la Cámara de Comercio, el jueves 22 de junio: Bueno será levantar un MONUMENTO A LA CALANDRÍA de tamaño natural y emplazado en alguno de los lugares emblemáticos de la ciudad ¡Echémoslo a andar! ¿Quién se monta?
La iniciativa para crear Parque Zapopan Central fue presentada por el presidente municipal Pablo Lemus ante el pleno del Ayuntamiento, el cual aprobó turnar el proyecto a las Comisiones de Hacienda, Patrimonio y Presupuestos para su análisis que, en principio, incluye la desincorporación y venta mediante subasta pública de siete predios municipales para financiar la obra.
Parque Zapopan Central se contempla desarrollar en un predio de 47 mil metros cuadrados localizado en la zona de La Curva a unos pasos de la Policía Municipal y el estadio de béisbol de Los Charros de Jalisco. Contará con un área verde de 41 metros cuadrados y el núcleo administrativo Centro Integral de Servicios de Zapopan (CISZ) donde los ciudadanos podrán realizar 543 trámites de 25 dependencias diferentes. Este edificio se alzará sobre 6 mil metros cuadrados.
El pleno del Ayuntamiento votó a favor derogar el comodato del predio ubicado en 5 de Mayo y Periférico, entregado al OPD Salud Zapopan, para reincorporarlo al patrimonio municipal, con lo cual podrá ser puesto en venta. Éste es un terreno en breña en zona de alta plusvalía y uno de los siete con los cuales se pretende recaudar 772 millones de pesos en total para financiar Parque Zapopan Central.
Estos siete predios suman 446 mil 994 metros cuadrados, se encuentran en Avenida Aviación, Periférico Norte, 5 de Mayo y Periférico, Río Blanco; Volcán Quinceo en la zona El Colli y dos dentro del complejo industrial Technology Park, y se asegura que serán vendidos a valor comercial.