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Yoga, es una opción de actividad física y bienestar integral
De los pueblos hindúes de la antigüedad, donde surgió hace más de 5 mil años como disciplina física y mental que permitía a los esclavos ‘liberarse’ del yugo impuesto por haber nacido en esa casta social, el yoga se extendió rompiendo culturas y fronteras y llegó a los países de occidente donde se popularizó en el decenio de los sesenta del siglo pasado. A la fecha suman millones de personas en el mundo quienes la practican y gozan de sus beneficios.
El yoga (del sánscrito ioga) combina la actividad física basada en ejercicios posturales que fortalecen el cuerpo, con la práctica de la meditación, por lo que resulta una opción muy útil para combatir uno de los peores problemas de salud que devienen del ritmo de vida actual: el estrés.
“Siendo muy honestos en el contexto en que estamos, lo que las personas descubrimos cuando hacemos yoga es la relajación, es bajar el ritmo. Durante una clase, que puede ser desde una hora hasta hora y media, te acercas a un ritmo muy distinto al que estás viviendo a diario, que tiene que ver con algo muy simple: respirar”, expuso Arllete Solano, instructora de esta disciplina, certificada en Hatha Yoga desde 2004.
“La respiración está ligada a los patrones mentales, a las vibraciones a las ondas cerebrales, y la forma en que respiramos tiene que ver con nuestros pensamientos. Por eso cuando llegamos a una clase de yoga, se invita a respirar de forma honda y tranquila, a que acompañes tu inhalación, hagas una pausa y exhales hasta expulsar todo el aire. En ese sencillo proceso, la mente comienza a relajarse”, describió.
Solano, directora de la revista especializada Rezpira, explicó que conforme se van realizando las posturas del yoga poco a poco se va alcanzando una conciencia del propio cuerpo y comienzan a corregirse defectos posturales, un segundo beneficio de esta práctica. Y es que aun cuando la estructura ósea del ser humano está diseñada para cargar todo el cuerpo, de pararse y caminar de manera no adecuada se genera dolor de espalda, dolor muscular y hasta dolor de cabeza.
“En el yoga, a diferencia de un gimnasio, lo único que se carga es el peso del propio cuerpo. Pararse alineado, con el ombligo adentro, con los músculos abrazando los huesos y yendo contra la gravedad, es suficiente para mantenerse saludable”, aseguró.
Esto se logra a través de la respiración, que a partir de los cuarenta minutos de práctica permite oxigenar a todo el organismo, y al llegar a una hora –el mínimo- el oxígeno circula desde la cabeza hasta los pies y los órganos pueden funcionar mejor.
Arllete Solano afirmó que en torno al yoga persisten muchos mitos. No es una práctica sólo para gente rica, ni sólo para personas delgadas ni para cierta edad. Esta disciplina la puede practicar casi cualquier persona. “Los ejercicios son sencillos, aunque curiosamente en Guadalajara se han popularizado las posturas más difíciles y eso aleja a las personas que dicen no poder tocarse la punta de los pies, pero hay opciones para todos… empezando por pararse y cargar tu propio peso de forma consciente y alineada”, dijo.
Otros ejercicios simples son mantener los brazos arriba, estirar bien las rodillas, respirar.
Además de respiración y ejercicios (posturas), otro pilar del yoga es la meditación, que se busca al final de cada postura. Esta parte ha tenido detractores, dada la inspiración en el hinduismo, el budismo y otras religiones de oriente. Al respecto la instructora precisó que en las escuelas tapatías no hay culto a ninguna deidad, como sí en la India, por lo que no se contrapone con las creencias cristianas. ¿Cómo empezar? Hay varios estilos de yoga y hoy también un abanico de tendencias, que permiten ejercitarse con los hijos (yoga con niños) o con los perros. Yoga para embarazadas o para niños. De acuerdo con la entrevistada, el Hatha Yoga es la disciplina original a partir de la cual se desarrollaron el resto, incluyendo el pilates. Y ciertamente es la más popular en occidente.
En todo caso, la instructora recomienda informarse: sobre la escuela más cercana (al hogar o trabajo según la necesidad), sobre los costos –hay clases gratuitas que ofrece el Comude Guadalajara, clases de aportación voluntaria en algunos parques de la ciudad y los fines de semana en la barranca en Huentitán, y clases privadas que van desde 400 hasta 2 mil pesos por mensualidad- y sobre el estilo que se ofrece, para así elegir la que mejor se adapte.
Esta disciplina no es de competencia sino un camino individual donde el reto es consigo mismo.
La entrevistada recordó que el yoga es una buena opción de actividad física y bienestar integral y una medicina natural que ayuda a paliar enfermedades.
Esta disciplina no es de competencia, aquí el reto individual es consigo mismo