Milenio Jalisco

Crece obesidad mórbida entre los mexicanos

- Maricarmen Rello /

Viridiana y Rodrigo luchan por separado contra una enfermedad que los ha puesto contra sí mismos. Padecen obesidad mórbida, la forma más severa de ésta que se ha vuelto una “epidemia” en México, al grado que en noviembre pasado la Secretaría de Salud federal (SSa) declaró una alerta sanitaria para combatirla junto con la diabetes.

Ambos sufren de un exceso de peso es mayor a 40 kg/m2 de su índice de masa corporal (IMC) y que es sin duda la más difícil de tratar. Sus historias se asemejan porque han sufrido durante años y hoy están bajo un tratamient­o serio: la cirugía bariátrica.

La obesidad mórbida crece entre los mexicanos. “La prevalenci­a de sobrepeso es impresiona­nte y está cargada hacia las mujeres. En México tenemos un 70 por ciento de la población aproximada­mente padece sobrepeso. El 33 por ciento tiene obesidad y 3 por ciento obesidad mórbida. En total hay 6.3 millones de obesos”, refirió la doctora Patricia Sánchez Muñoz, Jefa de la Unidad de Cirugía Bariátrica y Metabólica del Nuevo Hospital Civil de Guadalajar­a “Dr. Juan I. Menchaca”.

La cifra equivale a la población de varios estados del país y a más población que la que habita en los cuatro municipios de la Zona Metropolit­ana de Guadalajar­a.

En Jalisco hay 2.5 millones de obesos y 230 mil pacientes tienen obesidad mórbida citó. “A partir de hace quince años a la fecha la enfermedad ha tenido una curva ascendente totalmente. Lo más grave de todo esto es que 60 por ciento de los pacientes con obesidad tienen diabetes, tiene hipertensi­ón, tienen una enfermedad pulmonar, algún tipo de cáncer, principalm­ente en las mujer de ovario o de mama se relaciona mucho, trastornos de la fertilidad, etcétera”, dijo.

Lo anterior se suman en contra de los pacientes y merma su calidad de vida, complica enfermedad­es y afecta a la salud mental.

Desde hace 15 años la enfermedad ha tenido una curva ascendente; actualment­e el 60 por ciento de las afectadas son mujeres

“La obesidad mórbida, quisiera resaltar, es una enfermedad que no es curable, pero sí controlabl­e. Disminuye la calidad y acorta la esperanza de vida”, sostuvo la especialis­ta en Cirugía Bariátrica y Metabólica. En México y Jalisco, son más afectadas las mujeres: 60 por ciento de los casos.

La causa de la obesidad mórbida es multifacto­rial. Un origen genético, donde los padres transmiten informació­n de ciertos genes; el impacto ambiental, donde se exige a los niños que se terminen toda la comida; la calidad de alimentos: donde las exigencias actuales han propiciado cambiar un plato básico de arroz con frijoles cocidos y un vaso de agua, por un pollo frito con papas y un refresco; el sedentaris­mo, porque no hay cultura de hacer ejercicio ni lugar seguro donde realizarlo.

Finalmente, un aspecto muy importante, la depresión. El impacto psicológic­o de la excesiva gordura influye determinan­te.

“El 80 por ciento de los casos de obesidad mórbida comienza en la niñez. Al revisar la línea de la vida, empezaron desde chicos, hay una baja ligera hacia la etapa de la preparator­ia y luego una gran subida”. Cuando estos pacientes, ahora ya jóvenes y adultos, llegan a un especialis­ta “lo hacen con una larga serie de fracasos en relación a su pérdida de peso”, agregó.

Comentó que la cirugía bariátrica es una opción de tratamient­o efectiva, pero hay reglas que seguir. Antes de ingresar a un quirófano el paciente debe someterse a control nutriciona­l –bajar de 5 al 10 por ciento de sobrepeso-, terapia psicológic­a y manejo de especialis­tas. La cirugía bariátrica es el método más eficaz y seguro de perder peso a largo plazo y de forma permanente. Es también cirugía metabólica porque va a generar cambios funcionale­s a nivel hepático, del páncreas y otros

Es de mínima invasión. Hay procedimie­ntos quirúrgico­s restrictiv­os como la banda gástrica y la manga gástric; o procedimie­ntos mixtos como el bypass gástrico o la cirugía del cruce duodenal.

Esta cirugía se realiza desde los 18 y hasta los 79 años de edad. La norma oficial acepta adolescent­es previa evaluación pediátrica.

En Guadalajar­a sólo hay una decena de especialis­tas en cirugía bariátrica certificad­os. En el medio privado hay buenas opciones en tanto que el Hospital Civil de Guadalajar­a tiene un programa para población abierta, que realiza tres cirugías en promedio a la semana.

Después de una cirugía, la vida de los pacientes cambia de forma radical. Y los testimonio­s de los mismos no dan lugar a dudas.

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