Gobierno de CdMx desconocía la peligrosidad de Flores Hernández
Raúl Flores Hernández, presunto líder de una red de lavado de dinero, fue trasladado e internado en el penal de máxima seguridad del Altiplano, Estado de México, mientras se resuelve el proceso de extradición a Estados Unidos. La Subsecretaría del Sistema Penitenciario informó en un comunicado que Flores Hernández ingresó al Reclusorio Sur el pasado 21 de julio y su traslado al penal federal se llevó a cabo la madrugada del jueves.
En entrevista con Ciro Gómez Leyva para Grupo Fórmula, Patricia Mercado, secretaria de Gobierno de la Ciudad de México, confirmó que ahora el detenido está en manos de autoridades federales. “Finalmente ya en este momento podemos corroborar que lo llevamos, lo entregamos en el Altiplano, en Almoloya. Ya no lo tenemos nosotros, lo tienen las autoridades federales”, dijo.
Previamente, la funcionaria local dijo en ese mismo espacio informativo que el gobierno de la Ciudad de México solicitó trasladar a un penal federal a Flores Hernández, apodado El Tío, tras enterarse del nivel de peligrosidad que representaba al ser señalado por el Departamento del Tesoro como presunto líder de una red de lavado de dinero. “Ayer el titular del sistema penitenciario capitalino habló con su homólogo federal para que, a partir de esta información sensible que se conoce, sería importante, y por seguridad, que fuera trasladado a un penal federal. Hasta ayer dijeron que sería posible”, había dicho Mercado.
Explicó que el presunto lavador de dinero estaba en un área de medidas cautelares, porque el nuevo sistema de justicia penal impide que fuera enviado a una zona de mediana o alta seguridad.
Detalló que Flores Hernández convivía con otras personas en su misma situación en el Reclusorio Sur, pero desde el anuncio del Departamento del Tesoro de EU se tomaron medidas para que no estuviera con otros detenidos y fuera mantenido con mayor custodia.
Flores Hernández fue detenido el 20 de julio en Zapopan, Jalisco, y posteriormente fue trasladado al Reclusorio Sur de Ciudad de México.
El delincuente ya había sido detenido en 2013, cuando había una recompensa por su captura de 5 millones de pesos, pero fue liberado un año después.
De acuerdo con el Departamento del Tesoro de EU, Flores Hernández mantiene alianzas estratégicas con los liderazgos del cártel de Sinaloa y el de Jalisco Nueva Generación.